Fama, millones de dólares, camerino propio, jet privado y demás lujos de las estrellas de Hollywod, ¿quién no las querría verdad? Pues hay veces que los actores y actrices más célebres del mundo, simplemente, se cansan de ello. Bueno, a ver, debemos matizar eso: una vez que lo tienen asegurado, aprovechan y hacen las películas que verdaderamente les apetece hacer. Es el caso de los 10 actores de Hollywood que se pasaron al indie, una vez alcanzada una fama que, en muchas ocasiones, les estaba consumiendo. La mayoría de los que hemos incluido en la esta lista han estado aprovechando lo mejor de los dos mundos, regresando de cuando en cuando a los grandes estudios cuando la ocasión lo merecía. Otros han encontrado su hueco en el cine de bajo presupuesto y actualmente se dedican a ayudar a conseguir financiación proyectos más pequeños. Comencemos con nuestro breve repaso a una decena de estrellas que, con más o con menos dólares, nos siguen sorprendiendo con propuestas y papeles inolvidables: 

ROBERT PATTINSON Y KRISTEN STEWART

Empecemos por los que todos estábais pensando: Robert Pattinson y Kristen Stewart. La pareja más popular de 2008, año en el que la saga Crepúsculo dio el salto al cine y sacudió la taquilla de todo el mundo. La fama les llegó rápidamente y de forma inesperada. Ambos aceptaron el reto de sacar adelante las novelas de Stephanie Meyer por la rareza del guion y por la posibilidad de trabajar con una autora a la que admiraban, Catherine Hardwicke, directora de Thirteen. Ninguno de los dos (debieron de ser los únicos) se imaginaba que el fenómeno se convertiría en algo más grande que la vida y que aún les perseguiría. Stewart y Pattinson salieron tan quemados de esta titánica producción que, al terminar, y no sin antes exigir aumentos muy importantes de salario en la segunda parte de Amanecer, se volcaron en proyectos muy pequeños a los que se les daba luz verde con su sola presencia. 

Los años han pasado y su imagen de adolescentes teen se ha desvanecido casi por completo. Gracias a trabajos como Personal Shopper, American Ultra o Siempre Alice en el caso de Stewart o Good Time, Z. La ciudad perdida, sus recurrentes trabajos con David Cronenberg o su último estreno, El faro, en el caso de Pattinson, su carrera ha logrado enriquecerse y parece que los vampiros con brilli-brilli queda como una anécdota más de principios de siglo.

ADAM SANDLER

La carrera de Sandler a lo largo de más de dos décadas se ha forjado a partir de la comedia más zafia y efectiva que Hollywood ha sido capaz de crear. Títulos como Zohan, licencia para peinar, la estupenda Little Nicky, Click, El clan de los Rompehuesos, etc. hicieron de Sandler un nombre propio dentro de la industria y uno de los actores mejor pagados de la historia del cine, con todo lo que eso conllevaba. Su caída tardó en llegar, pero llegó. Y tuvo que venir Netflix para que Adam Sandler finalmente brillara como se merece. The Meyerowitz Stories y Uncut Gems han marcado un antes y un después en la trayectoria de Adam Sandler, hasta el punto de estar en la pomada para lograr su primera nominación a los Premios Oscar por la película de los hermanos Safdie.

BILL MURRAY

¿A quién vamos a llamar? Pues a Bill Murray, por supuesto. El protagonista de Cazafantasmas es uno de los máximos exponentes de esos actores del Hollywood de toda la vida que se decantó por el lado más artesano del cine. Esa llegada al mundo independiente le ha brindado más alegrías de las que todos hubiéramos imaginado, empezando por su única nominación al Oscar a Mejor Actor por Lost in Translation, una de las películas más bellas del siglo XXI. Además de la cinta de Sofia Coppola, a Murray se le ha podido ver como un habitual en el cine de sus amigos Wes Anderson (como a muchos otros de este mismo listado) o Jim Jarsmuch y en la simpática St. Vincent, por la que fue nominado al Globo de Oro.

Sus participaciones en el cine comercial no han desaparecido, pero ya se limitan únicamente a breves cameos con los que hacer las delicias del público. Porque, reconozcámoslo, siempre es un placer ver a esta leyenda de la gran pantalla.

MICHELLE WILLIAMS

El caso de Michelle Williams es, quizá, el más peculiar de este listado. Su participación en el cine independiente ha ido al contrario que la mayoría de actores de Hollywood. Primero se ha dedicado a hacer lo que ha querido con cintas pequeñas y de gran calidad artísticas como Blue Valentine, Mi semana con Marilyn, Brokeback Mountain o I’m Not There para luego hacer su entrada a lo grande en el cine comercial con Venom, Oz, un mundo de fantasía o El gran Showman. Williams ha declarado multitud de veces (sobre todo durante la promoción de Venom, en la que directamente no sabía ni qué estaba haciendo en esa película) que se siente mucho más cómoda fuera del sistema de estudios. Pero, como bien sabemos todos, hay que comer. Aun así, no esperemos ver demasiado a la actriz de Manchester frente al mar en superproducciones. El indie es su verdadera casa.

STEVE BUSCEMI

Cuando hablamos de Steve Buscemi hablamos de uno de esos secundarios tan agradecidos de toda la vida, que siempre han estado ahí y que con su mera presencia la película ya parte de un 7. Habitual robaescenas y alivio cómico en las películas de los hermanos Coen, Big Fish, Pulp Fiction, Armageddon, Los Soprano, Los muertos no mueren… Desde hace ya varios años, hemos notado que ha prestado más atención y se siente más cómodo en películas independientes, ajenas en su mayoría a los grandes estudios, como La muerte de Stalin, Ghost World o Lean on Pete. Dentro o fuera de Hollywood, la carrera de Buscemi, con más de 100 trabajos como actor y una decena como director y productor, es de las que todo intérprete desearía tener.

NATALIE PORTMAN

La que podríamos considerar como una de las mejores actrices del presente, Natalie Portman, también ha sido una de las intérpretes que decidió poner distancia con los blockbusters. Aunque va a pasar a la historia merecidamente por su brutal interpretación en el Cisne Negro de Darren Aronofsky, el gran público siempre la va a recordar por su participación en las dos mayores franquicias cinematográficas del momento: Star Wars y el MCU. Tras su incomprensible participación en Thor y viendo lo bien que la fue en el independiente un año antes ganando el Oscar, Portman se alejó de los estudios acercándose a directores como Terrence Malick y proyectos como Jackie, Aniquilación o Vox Lux. A pesar de todo, sus fans pueden estar de enhorabuena porque ya ha sido confirmada para aparecer en la nueva película de la saga del dios del Trueno, Thor: Love and Thunder. 

DANIEL RADCLIFFE

En este puesto de nuestra lista, se podrían combinar dos célebres nombres que encajan en el mismo perfil: Daniel Radcliffe y Elijah Wood. Ambos actores convertidos en estrellas mundiales prácticamente desde la infancia y rápidamente caídos en el olvido devorados por sus propios personajes. El caso de Radcliffe es más llamativo que el del eterno Frodo. La popularidad que alcanzó la franquicia cinematográfica de Harry Potter y el particular e inconfundible físico de su protagonista lo condenaron a una difícil carrera post-Harry-Potter. Desde comienzos de la década de 2010, Radcliffe se ha convertido en una cara habitual de películas de bajo presupuesto, algunas muy conocidas como Cuernos o Swiss Army Man junto a Paul Dano. Proyectos no le faltan, pues no deja de trabajar, de hecho para 2020 ya tiene programados varios estrenos, pero de cara al gran público, su carrera comenzó y finalizó en Hogwarts. Ojalá nos calle la boca a todos pronto.

EDWARD NORTON

Norton, que está a punto de estrenar en España su segunda película como director, Huérfanos de Brooklyn, es otra de las grandes estrellas conocidas en todo el planeta que también disfruta de las dos caras del cine. El actor puede presumir de haber alcanzado la fama mundial gracias a proyectos (ligeramente) alejados de Hollywood: American History X, La última noche, El club de la lucha, Birdman o la inesperada virtud de la ignorancia y varias de las películas de Wes Anderson en las que ha aportado su grano de arena, como El gran hotel Budapest o Moonrise Kingdom. Su estatus como actor y su  versatilidad para dar vida todo tipo de papeles hace que, inevitablemente, nos sorprendamos al comprobar su escasa aparición en títulos cinematográficos recientes (sin contar Alita: Ángel de Combate o ese despropósito titulado Belleza oculta).

NICOLE KIDMAN

Y dejamos a la reina para el final. Una de las indiscutibles realezas de Hollywood es otra de las actrices que decidió inteligentemente dar el salto y apoyar a proyectos más pequeños. Tras una carrera atropellada a principios de los 2000 en el cine comercial, con películas como Embrujada, La brújula dorada, Nine, Invasión, Grace de Mónaco o Australia, la ganadora del Oscar se centró en lo independiente, pero de una forma que la ha diferenciados de los demás actores y actrices de esta lista: jamás ha olvidado Hollywood ni Hollywood la ha olvidado a ella. A pesar de su exitosa incursión en la televisión y en películas modestas, Kidman ha vuelto siempre al lugar que la dio la fama mundial, consiguiendo lo mejor de los dos mundos. Porque si saber combinar parejas de filmes tan locas y dispares como Paddington y Los secretos del corazón, Aquaman y El sacrificio de un ciervo sagrado o El escándalo y Cómo enamorar a una chica punk no es razón para ser considerada ya una leyenda… dinos tú qué es.

Lo que hemos aprendido con el tiempo y tras ver decenas de películas de estos maravillosos actores y actrices es que, da igual si es en un multicines o en un cine de barrio, lo importante es poder ver y disfrutar de su trabajo. Esto no es el Barcelona contra el Real Madrid. La lucha de los espectadores entre Hollywood y el independiente ha desaparecido y la líneas está cada vez más difuminada. Y no cabe duda de que salimos ganando todos. Por supuesto, si se te ocurre algún otro ejemplo de intérprete que se ajuste a este listado, no dudes en ponerlo en los comentarios y lo iremos ampliando entre todos los usuarios de El Palomitrón.

Víctor Vargas

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Crítica de El Faro