ANTECEDENTES

Jaime Chávarri es uno de esos nombres que brillan con luz propia en el cine español. Activo desde los años 70, por su mano han pasado títulos tan reseñables como el documental El desencanto (1976) o la película de ficción Las bicicletas son para el verano (1984), entre muchos otros. Es de agradecer, pues, esa ansia incombustible que le permite seguir realizando trabajos, el último de los cuales es la película que ahora mismo nos ocupa, La manzana de oro, basada a su vez en un libro de Fernando Aramburu. Tras la crítica a la inquietante La desconocida, la rejuvenecedora Els Encantats, la histórica Un cel de plom, la alegre Esperando a Dalí y la novedosa Alguien que cuide de mí y ya observando el final de esta edición del BCN FILM FEST, nos adentramos con el último trabajo de Jaime Chávarri, La manzana de oro.

LA PELÍCULA

La manzana de oro narra las jornadas poéticas de un fin de semana en un convento aislado en el norte de España. Por sus jardines, salones y comedores pasean poetas y poetisas que vuelven a competir por enésima vez por el gran premio del fin de semana, la Manzana de oro. Sin embargo, las envidias y los celos, el desafío y la competición entre todos ellos, las historias amorosas nunca conclusas y las historias sexuales constantemente alargadas acabarán por poner patas arriba un fin de semana que se antojaba inicialmente tranquilo para convertirse en un maremágnum de voces, emociones y sentimientos cruzados y encontrados en esta comedia de situaciones donde todo puede llegar a pasar.

Se antoja difícil llegar a definir La manzana de oro, aunque sea una grata aproximación al BCN FILM FEST, ya que nos reencontramos con el alma misma de un festival que apuesta por la comunicación constante entre cine y literatura. En esta ocasión lo hace a través de una película que escucha al libro de Aramburu en el que se basa, pero a la vez plantea una trama basada en la literatura misma, poesía, en este caso, para narrar el sentir de la vida.

La nueva película de Jaime Chávarri nos devuelve al mejor cine de comedia española, esa comedia de situaciones, en ocasiones esperpénticas, que viene precisamente del devenir de la misma vida. El humor de su guion plantea constantes encuentros entre personajes muy distintos que hacen estallar las constantes tensiones latentes bajo las agradables palabras de todos ellos en su lucha por el gran premio del fin de semana. La trama coral que se erige sobre la miríada de personajes nos permite disfrutar de las múltiples relaciones que se establecen entre todos ellos gracias a actores y actrices como una elegantísima Marta Nieto, un siempre cómico Sergi López, una dubitativa Vicky Peña aliada con la escandalizada Elena Seijo o un retorcido Roberto Enríquez, entre muchos otros más.

Si hay algo que reprochar a esta película es quizás que algunas de sus situaciones ocasionalmente acaban siendo demasiado teatralizadas y esclerotizadas y eso hace que el ritmo de esta se vea resentido por ello, especialmente cuando su humor es demasiado de nicho en determinadas situaciones. Quizás La manzana de oro no es la gran película del festival, pero su apuesta por una comedia ligera y blanca, un elenco plural y la alegría por seguir viviendo que transmite la película la hacen merecedora de acercarnos al cine para poder ser críticos según nuestros propios criterios.

ELLOS Y ELLAS

Si bien es cierto que parte del peso de la película recae en Marta Nieto (Edén, Tropique) y Sergi López (La grande magie, Pacifiction), son muchos los rostros conocidos del cine español que se asoman a la pantalla, tales como Ginés García Millán (El comensal, La novia gitana), Vicky Peña (Esperando a Dalí, La abuela), Roberto Enríquez (La cocinera de Castamar, El desorden que dejas) o Elena Seijo (Cuerpo abierto, Feria: La luz más oscura).

LA SORPRESA

Que alguien como Chávarri haya apostado por una propuesta muy poco trabajada en el cine español.

LA SECUENCIA/EL MOMENTO

Un final que corta la respiración.

TE GUSTARÁ SI

• Agradeces las comedias españolas en clave de situaciones absurdas.

LO MEJOR

• Las relaciones de familiaridad que se establecen entre todos los personajes y que tan bien saben llevar sus actores y actrices que los encarnan, casi como si se hubieran conocido siempre.
• Marta Nieto y Sergi López, sin duda. La presencia de ella y el desparpajo de él elevan la película.

LO PEOR

• El momento del rap, totalmente innecesario.
• Un ritmo al que quizás le falte en ocasiones un poco de fuerza.
• Que quizás su humor sea un humor más orientado a determinadas edades adultas en vez de a los más jóvenes, quienes quizás no lo comprendan.

Javier Alpáñez