LOS ANTECEDENTES
En pleno mes del Orgullo LGTB, llega a los cines españoles de mano de Filmax El secreto de las abejas, un nueva propuesta en la que el foco se pone en el delicado romance entre dos mujeres. En esta ocasión, las protagonistas son Anna Paquin y Holliday Grainger y tras la cámara se encuentra Annabel Jankel, cineasta responsable, junto con Rocky Morton, de la película de Super Mario Bros y el thriller ochentero Muerto al llegar. Dentro de una década en la que parece que las historias estelarizadas por lesbianas se están empezando a escuchar de verdad (aunque no lo suficiente), con obras maestras como Carol de Todd Haynes, Palmas de Oro como La Vida de Adele o maravillas como San Junipero (Black Mirror), la película de Jankel suma otro gran relato en el que todos nos podemos ver representados, de una forma u otra. Aquí os traemos nuestra crítica de El secreto de las abejas.
LA PELÍCULA
El secreto de las abejas, basada en la novela homónima de Fiona Shaw, relata la historia de amor entre Lydia (Hooliday Grainger), madre del pequeño Charlie y separada de su amenazador marido, y Jean (Anna Paquin), la nueva doctora de un pequeño pueblo de la Escocia de los años 50 al que regresa tras morir su padre. Una época, un pueblo y sus habitantes que no tenían ninguna intención de ponérselo fácil a las protagonistas, o a cualquiera que se pudiera salir de la norma. La película no solo denuncia la homofobia, sino también las relaciones interraciales, la hipocresía, la violencia de género o la explotación laboral.
Lo que más tenemos que destacar en esta crítica de El secreto de las abejas son los dos personajes femeninos principales, fuertes e independientes, cada uno a su manera. La forma en la que ambas mujeres están escritas, dirigidas e interpretadas eleva la película y la convierte en una de las principales razones para acudir al cine a conmoverse con su historia.
El film de Jankel respira buenas intenciones en cada fotograma y termina resultando una película agradable y complaciente que te da exactamente lo que te esperas de ella. Quizá peca de utilizar una fórmula muchas veces vista y cuesta encontrar momentos realmente genuinamente originales. Esto no impide que se disfrute enormemente de ella. Eso sí, la sensación de película de media tarde es difícil quitársela. A su favor, hemos de decir que el cine LGTB no solo debe tener obras cumbre como Carol o Call Me By Your Name, también necesita de cine mainstream como Con amor, Simon, y de cine más modesto y accesible como El secreto de las abejas, que se estrena este próximo 21 de junio .
ELLOS Y ELLAS
En nuestra crítica de El secreto de las abejas tenemos que hablar sobre todo de ELLAS. Paquin y Grainger están espectaculares con una química que logra la empatía y la sonrisa cómplice de los espectadores. Destaca Grainger por encima de su coprotagonista, quizá por ser un rostro menos conocido que el de la actriz de El Piano y conseguir desaparecer mejor en el personaje. Aun así, la una necesita a la otra y, de nuevo, están realmente bien.
En la piel de Charlie, el pequeño de la película, se encuentra Gregor Selkirk comenzando una prometedora carrera en el cine británico. Emun Elliot es el encargado en esta historia de dar vida al padre y villano, que recuerda al Sergi López de El laberinto del Fauno… o al Michael Shannon de La forma del agua. Elliot ya es un rostro más que conocido por gran parte del público, al haber participado en blockbusters como Star Wars: El despertar de la fuerza o Exodus: Dioses y Reyes.
Por último, resulta una obligación destacar a Kate Dickie. Aunque por su nombre quizá no te suena, seguro que sí recuerdas a la odiosa Lysa Arryn de Juego de Tronos. En esta película, vuelve a hacer uso de su mala uva interponiéndose en el romance de las dos protagonistas.
LA SORPRESA
Holliday Grainger. Consigue hacer sombra a su compañera, la ganadora del Oscar Anna Paquin.
LA SECUENCIA / EL MOMENTO
El final. Es un gran desenlace para esta historia. Emotivo y tierno, que saca sonrisas y lágrimas a partes iguales.
TE GUSTARÁ SI…
Disfrutas de un buen melodrama romántico del que recibes exactamente lo que te esperas.
LO MEJOR
- Las escenas de bailes. Pocas cosas consiguen mejorar tanto una película (y sacar una sonrisa) que ver a los personajes ponerse a bailar.
- La pareja protagonista.
- El final.
LO PEOR
- Sentir que podría haber sido mucho más de lo que termina siendo.
- Que tenga ese regusto a telefilm de media tarde.
- Cierta falta de imaginación.
Víctor Vargas
