EL CINE CÓMICO DE JOSÉ LUIS CUERDA Y EMILIO MARTÍNEZ LÁZARO
José Luis Cuerda y Emilio Martínez Lázaro estrenan película, por separado, este mes de diciembre, y por ello aprovechamos la ocasión para repasar cuáles han sido sus títulos más destacados dentro del género de la comedia.
EMILIO MARTÍNEZ LÁZARO
Miamor perdido se estrenó el pasado 14 de diciembre y supone el regreso del director Emilio Martínez Lázaro después del éxito obtenido por el díptico Ocho apellidos vascos (2013) y Ocho apellidos catalanes (2015). El cineasta vuelve a la gran pantalla con su actor preferido, Dani Rovira, acompañado por Michelle Jenner y por el veterano Antonio Resines, entre otros.
El género de la comedia es algo común dentro de la filmografía de Martínez Lázaro, no tanto desde sus primeras películas pero sí teniendo en cuenta la totalidad de su filmografía. Para evidenciar su dominio en los territorios del humor, hemos seleccionado cinco títulos:
1. El juego más divertido (1987)
Protagonizada por Antonio Valero, Victoria Abril y Antonio Resines, se trata de una comedia muy influenciada por el vodevil francés y por películas españolas de la época como Se infiel y no mires con quién (1985) de Fernando Trueba o La vida alegre (1987) de Fernando Colomo. Es una comedia de enredos donde se mezcla la realidad y la ficción a través de dos historias paralelas: el romance de los protagonistas en una serie (ficción dentro de la película) y el romance no conseguido de los mismos protagonistas en la vida real. Es una comedia muy alocada, donde se intenta provocar situaciones surrealistas pero no se consigue del todo por lo que se queda a medias entre la comedia y el drama.
2. Amo tu cama rica (1991)
Martínez Lázaro, al igual que hace en la última película que estrena este mes, se rodeaba de jóvenes actores que de alguna manera estaban despuntando, tal es el caso de Ariadna Gil y Pere Ponce en Amo tu cama rica (1991). Es la típica historia de chico conoce a chica y tras una serie de acontecimientos y peleas el chico se queda con la chica. Pero la diferencia aquí se evidencia en la personalidad de los personajes, aquí la que lleva la voz cantante es la chica (interpretada por Ariadna Gil) y el chico (Pere Ponce) es el reprimido e inseguro con una tremenda incapacidad de decisión. En el guion participó David Trueba, que por generación estaba más afín a cómo se debería comportar esta juventud. Además, el filme supuso el comienzo de una serie de comedias donde la temática principal eran los problemas cotidianos de la juventud de la época, películas como Todo es mentira (1994) de Álvaro Fernández Armero (ahora mismo de rabiosa actualidad gracias a la serie Vergüenza) o Los peores años de nuestra vida (1994).
3. Los peores años de nuestra vida (1994)
Gabino Diego es el protagonista de esta historia donde el fracaso de los personajes es lo más llamativo e interesante de la propuesta. Gabino Diego interpreta a un tipo corriente, feo y enamoradizo, y junto con Jorge Sanz y Ariadna Gil conforman un triángulo amoroso, donde la inteligencia va a parar al personaje de la chica y la torpeza a los personajes de los chicos. La historia es de David Trueba y tiene -al igual que en Amo tu cama rica la frescura de un joven de 24 años, que era la edad de Trueba en aquel entonces, y ello se evidencia en la forma de interpretar que tienen los actores, la naturalidad que irradian e incluso en las situaciones amorosas que disfrutan y también padecen.
4. El otro lado de la cama (2002)
Es un musical que se rodó en una etapa donde no se hacían musicales y con actores conocidos cantando, esa era la clave. Es un encargo que le llega a Martínez Lázaro a raíz de una idea surgida por el director David Serrano, que es quien firma el guion, pero los productores de la película pensaron rápidamente en Martínez Lázaro para la dirección. Las canciones que se interpretan son nuevas versiones de temas muy conocidos pero la clave era que los temas que cantaban se ajustaban a la perfección con los sentimientos y preocupaciones de los personajes. Es una apuesta arriesgada quizá influenciada por Todos dicen I love you (1996) de Woody Allen donde lo menos que importaba era si cantaban o no bien los actores. Las mentiras, los celos, la tentación o la infidelidad son los temas más recurrentes en la filmografía del director y aquí están presentes una vez más.
5. Ocho apellidos vascos (2013)
No podemos finalizar este repaso sin mencionar el último gran éxito en la filmografía del director que recaudó más de 55 millones de euros y una media de 9 millones de espectadores acudieron a las salas para ver esta historia llena de tópicos, clichés e intentos de provocar carcajadas en el espectador, las cuales no se consiguieron demasiado. Supuso el descubrimiento de Dani Rovira como actor y junto con Clara Lago se convirtieron en la pareja de moda. Con el paso de los años, Dani Rovira sigue cosechando éxitos y el ejemplo de ello es que el cineasta ha confiado en él, una vez más, para que sea el protagonista de su nueva película, Miamor perdido.
JOSÉ LUIS CUERDA
Descubrir la filmografía de José Luis Cuerda supone, en primer lugar, adentrarse en un universo muy particular (en cuanto a su etapa más cómica) pero también sorprende, en segundo lugar, el cambio de registro que realiza a partir de La lengua de las mariposas (1999) donde se apartó de la comedia totalmente y optó por películas con el drama y la historia de este país como temas principales [destacando Los girasoles ciegos (2008) y, en menor medida, Todo es silencio (2012)]. Después de varios años (llevaba desde 2012 sin dirigir una película), vuelve al cine y lo hace con el género por el que más se le conoce, el humor absurdo, la comedia loca típica de su Amanece, que no es poco y Así en el cielo como en la tierra; la nueva película se titula Tiempo después y se estrena el próximo 28 de diciembre. Por este motivo, hemos hecho un repaso de sus comedias más destacadas:
1. Pares y nones (1981)
Parece difícil concebir que la primera película que dirigió Cuerda, después de sus primeros escarceos en la dirección en cosas de TVE, sea una comedia casi romántica, de líos amorosos, con Antonio Resines y Silvia Munt como principales protagonistas. Cuerda sorprende con una comedia que resulta entretenida pero que no hace presagiar, en ningún momento, lo que se atrevería a dirigir años después. En su día, el cineasta la definió como una “comedia sanamente miserable” donde muestra el proceso de separación de un matrimonio en la España de los últimos meses de la Transición para así hablar de infidelidades, amistades y amores. También fue el segundo papel importante en la trayectoria de Antonio Resines, un nombre vinculado también a la filmografía de Cuerda.
2. Total (1983)
Su obra más conocida puede que sea Amanece, que no es poco pero en 1983 rodó una especie de mediometraje, ya que no llegaba a la hora de duración, con Agustín González como protagonista donde se presentaba ese universo amanecista. La película presuntamente se desarrollaba en Londres en un “Crudo invierno del año 2598. Después de la gran nevada que mató a los pájaros y a las ovejas” y es un relato de necesario visionado para entender lo que vendría después, las dos películas con las que se cierra esa trilogía tan surrealista y tan rural: Amanece, que no es poco y Así en el cielo como en la tierra. No fue una película estrenada para la gran pantalla sino que se hizo para televisión pero con ella se entiende todo lo que le interesaba mostrar a Cuerda de ese mundo rural, ese espacio que rescataría años más tarde con El bosque animado (1987).
3. Amanece, que no es poco (1988)
Total fue un primer ensayo que le sirvió a Cuerda para culminar toda esa locura en 1988 con Amanece, que no es poco. Es una película considerada de culto, y es la obra maestra de Cuerda. Se fue a rodar a su tierra, a Albacete, y ahí crea un ambiente rural propicio para mostrar a una serie de personajes a cada cual más alocado y divertido. Es un filme que no se concibe sin su coralidad, el reparto está formado por históricos del cine español desde Miguel Rellán a Luis Ciges pero destacando a jóvenes como Quique San Francisco, Antonio Resines o Gabino Diego. Los personajes están muy bien definidos y por su naturaleza solo se podrían entender en el hábitat que crea Cuerda para esta película. Se podrían encontrar rasgos del cine de Luis García Berlanga o características de Miguel Mihura o Luis Buñuel pero lo interesante es que él sabe darle una forma muy personal a todo el conjunto del filme. La acogida no fue exitosa (tan solo recaudó cien millones de pesetas) ya que el desconcierto que produjo la película fue absoluto y tuvieron que pasar varios años hasta que se apreciara y valorase la naturaleza de la propuesta.
4. La marrana (1992)
Con motivo del quinto centenario del descubrimiento de América, en 1992 a José Luis Cuerda se le ocurrió la historia de dos individuos que en la España rural del siglo XV tienen el sueño de embarcarse en la Pinta, en la Niña o en la Santa María, los tres barcos con los que Colón descubrió América en 1492. Se trataba de hablar de la historia en mayúsculas pero desde personajes insignificantes, no centrándose en ningún nombre importante de la época. Cuenta la historia de dos hombres que se encuentran en los caminos de esa España de 1492, Antonio Resines y Alfredo Landa (junto con la marrana que también es protagonista de la historia) llenos de la picaresca que genera el hecho de pasar hambre, son dos seres hambrientos que se buscan la vida en un ambiente totalmente rural. Una vez más, Cuerda habla de lo que mas le interesa, la picaresca y la ruralidad.
5. Así en el cielo como en la tierra (1995)
Se trata de una película donde Fernando Fernán Gómez es Dios, Jesús Bonilla interpreta a Cristo, Paco Rabal es San Pedro y Quique San Francisco el Arcángel Gabriel, junto con todos ellos llega Luis Ciges anunciando el apocalipsis. Solo con esa sinopsis ya se intuye la locura total de este cineasta. Cuerda estudió en el seminario durante tres años y esos conocimientos le sirvieron para la película, abandonó sus creencias y esa crisis de fe que él vivió la representa (en la película) en el Dios (interpretado por Fernán Gómez) el cual ante el gran número de agnósticos decide que la culpa es de su hijo, de Cristo. Por lo tanto, Dios decide que quiere tener un nuevo hijo. Con este largometraje se conforma la trilogía que empezó en 1983 con Total y sigue con Amanece, que no es poco. Se trata de una comedia muy respetuosa porque se nota que Cuerda sabe de lo que habla y eso le hace ser muy sutil en su planteamiento, además de rodearse como siempre de un reparto de secundarios absolutamente brillante.
Con todo esto, solo nos queda recordar que José Luis Cuerda estrena el próximo 28 de diciembre, Tiempo después, y no os la podéis perder si os maravilla ese universo creado en 1983 y culminado en 1988 con Amanece, que no es poco. En Tiempo después ese humor surrealista vuelve, sigue ahí y no da síntomas de estar anticuado sino que está más vivo que nunca.
Javier Valera