TAIKA WAITITI: O CÓMO PASAR DE CÓMICO DE CARRETERA A TRABAJAR PARA MARVEL
No es ninguna tontería referirse a Taika Waititi (Wellington, 1975) como uno de los directores que más ha triunfado en estos últimos cinco años, dando un salto enorme del cine independiente al mainstream, pasando de ganar premios en Sundance a ser el nuevo enfant terrible de la Marvel. También le señalaríamos como una de las personalidades que más trabajo asegurado tienen para la nueva década, con títulos como hasta hace poco el remake de Akira (que aunque se haya cancelado no perdemos toda la esperanza), episodios de la posible segunda temporada de El Mandaloriano o la nueva película de la saga de Thor.
Cualquier excusa sería buena para hablar de este neozelandés de tan peculiar sentido del humor, pero en esta caso aprovecharíamos el estreno de su última película, Jojo Rabbit, para darle un pequeño y humilde homenaje.
UN CÓMICO POR NUEVA ZELANDA
Taika estudió interpretación en la universidad Victoria de Wellington, y aunque esto le ayudó en parte a formarse como artista, lo que realmente le marcó fue pertenecer al grupo cómico, So you’re a Man, con el cual se dedicó a hacer tours por Nueva Zelanda mostrando sus rutinas cómicas. Fue aquí , gracias a estos «roadtrips» con gente con tanto talento, donde llegó a asentar su original sentido del humor, el cual es su seña de identidad a día de hoy y podemos ver en todas sus películas.
LA NUEVA PROMESA DEL INDIE
Por otro lado, y aunque se sentía muy contento siendo un cómico de relativa fama, en sus ratos libres el joven Waititi ya había comenzado a grabar cortos propios. Entre los trabajos que hizo durante este periodo destaca Two Cars, One Night, que le llevó a una nominación en los Óscars.
Este éxito hizo que se planteara el trabajo de director de cine de forma seria, y por consecuente, hizo su primer largometraje llamado Eagle vs Shark en 2007, con una acogida relativamente buena entre los amantes del indie. Tres años después estrenó su segundo film (otra vez) en el festival de Sundance, convirtiéndose en un hit dentro del medio/bajo presupuesto y consiguiendo un aluvión de críticas positivas por los medios especializados. Esta película, en parte culpable de que se escuchara su nombre en Hollywood, se llamaba Boy, y consistía en la historia íntima de un niño que idealiza a su padre desaparecido hasta que este vuelve a su vida. Está claro que Waititi ya sobresalía trabajando con niños actores, y esto quedó más que constatado en cintas como Jojo Rabbit o Cazando Salvajes.
Su último film, que encajaría en este molde de las producciones pequeñas, sería Cazando Salvajes, protagonizada por Sam Neil y Julian Dennison (sí, el niño repelente de Deadpool 2). Esta película, que por tercera y última vez tendría su premiere en Sundance, consiguió ser el mayor éxito en taquilla de Nueva Zelanda del año 2016, y colocarse, prácticamente desde su estreno, en un clásico del cine juvenil de aventuras.
DE VAMPIROS Y REALITYS
El gran antes y después de la carrera de este neozelandés fue sin duda Lo que hacemos en las sombras, una comedia divertidísima que destacaría por su peculiar sentido del humor y el uso del formato reality televisivo como estética visual. La idea ya había surgido en un anterior corto del director en 2005, pero finalmente tomó forma en 2014, siendo acogida con fervor tanto por público como por crítica. La idea consistía en juntar 4 vampiros compañeros de piso y seguir sus aventuras como si se tratara de un programa de televisión. La película, que está considerada como una de las mejores comedias de la década, acaba convergiendo en un mix de gags, diálogos y referencias a la cultura popular dentro del mito del vampiro. Una joya postmodernísima que estrenó serie en 2018 de la mano de FX con Taika como productor ejecutivo.
TRIUNFANDO EN MARVEL
Muchos periodistas se aventuraron a coronar a Taika Waititi como el gran salvador de la compañía Marvel, y aunque esto no sea una afirmación 100% valida para nosotros, no podemos negar que supuso el renacer de la saga de Thor. Por un lado, la compañía necesitaba renovar esta serie de películas, ya que no eran demasiado celebradas por la audiencia. El estilo, cada vez más oscuro Alan Taylor o Kenneth Branagh, no acababa de cuajar, y aunque Thor era un personaje querido por el público de Los Vengadores (Josh Whedon, 2012), no tenía la chispa suficiente en solitario. Por el otro lado, Waititi ya se consideraba un fan de este superhéroe y no quería dejar pasar esta oportunidad para dejar su huella en el cine mainstream. El resultado ya lo conocemos. La Marvel dejó absoluta libertad creativa a Taika y de la noche a la mañana Thor: Ragnarok se convirtió en una de las mejores y más aclamadas películas de la compañía.
JOJO RABBIT Y UN FUTURO PROMETEDOR
Aunque no nos vamos a explayar demasiado en Jojo Rabbit, ya que ya sacamos un artículo explicando sus detalles, si nos gustaría decir que es la muestra absoluta de que Taika Waititi está en plena forma, y que sin duda nos encontramos ante un artista de gran sello autoral que no debemos dejar pasar por alto. Pocos son los directores que se han atrevido a hacer comedia de uno de los temas más serios de la historia del siglo XX: el auge del nazismo. Por eso mismo os recomendamos de forma reiterada que la veáis, ya que lo que ha conseguido no es fácil, y creednos si os decimos que trata el tema con el respeto y el cariño suficiente para no caer en amarillismos ni en sentimentalismos. No os arrepentiréis.
Por último, poco más podemos añadir de uno de los nombres que más han resonado en Hollywood estos últimos años. Por ahora le espera una secuela de Thor, ver cómo funciona su nueva comedia sobre nazis en la taquilla y confirmar su próxima colaboración en la posible segunda temporada de El Mandaloriano. Todo esto sin haber entrado casi en la década. Tras escribir el artículo nosotros hemos sacado bastantes cosas en claro: ¿Qué el neozelandés tiene un futuro prometedor tanto en solitario como de la mano de una de las compañías más importantes del mundo? Efectivamente. ¿Qué tanto su legión de fans como los críticos ya considera el sello Waititi como una marca de calidad? Por ahora sí, aunque se lo tendrá que seguir trabajando. ¿Nosotros estaremos en primera fila para comprobarlo? De eso podéis estar 100% seguros.