ANTECEDENTES

Chus Gutiérrez (Granada, 1962) siempre ha tenido claro que se convertiría en directora de cine. Con apenas 21 años de edad, decidió dar un importante paso en su vida y estudiar cine en Nueva York. Tan sólo las valientes, las que tienen muy claro quiénes son y a qué aspiran en su vida, toman una decisión tan acertada como la que Chus tomó hace 40 años. El tiempo le ha dado la razón, ya que, tras 30 años dirigiendo películas, todavía puede seguir haciéndolo y viviendo de ello. Desde luego, su carrera se acerca mucho a la definición y al ejemplo de éxito personal en el que todos debemos fijarnos.

Hace unos años, Chus decidió aceptar su primer proyecto por encargo, el cual se titula Sin Ti No Puedo. Para Chus ha sido una experiencia distinta y compleja, para la que ha tenido que utilizar todos los conocimientos que ha ido adquiriendo durante los 30 años que lleva dirigiendo películas. El resultado, en el próximo párrafo (y mañana en cines).

LA PELÍCULA

Las altas expectativas siempre son malas compañeras de viaje. Quizás nunca debamos entrar en una sala esperando algo distinto de una película, pero lo cierto es que el corazón siempre te traiciona. Incluso a los que estamos acostumbrados a decepcionarnos habitualmente con las películas. Lo cierto es que de Sin Ti No Puedo esperaba algo distinto, algo que, a pesar de no ser magnífico, justificara la hora y media en la que esta película iba a captar mi atención. Al observar los créditos finales, si algo tengo claro es que Sin Ti No Puedo no ha cubierto mis expectativas. Ni siquiera me ha seducido en prácticamente ningún momento de sus 90 minutos de duración.

En Sin Ti No Puedo, David es un empresario de éxito que tiene una vida acomodada junto a su novio Álex, un atractivo monitor de gimnasio. Álex siempre ha querido ser padre y a menudo se plantea qué camino seguir para lograrlo… ¿Adopción? ¿Vientre de alquiler? Aunque David no quiere ni oír hablar del tema. Todo sigue su curso hasta que irrumpe en sus vidas Blanca, la hermana de David con la que rompió toda relación tras un oscuro suceso del pasado. Ahora empieza una nueva etapa y decidida a recuperar la única familia que tiene: su hermano David. Y será capaz de hacer cualquier cosa para que su hermano vuelva a aceptarla en su vida.

El problema de esta película no está en su planteamiento. En él se observan cuestiones que pueden funcionar de forma aislada e, incluso, como conjunto. Ahora bien, la forma de llevar esta idea a la gran pantalla es equivocada. Quizás se deba a exigencias de producción, pero da la impresión de ser más una telenovela que una película que aspira a permanecer en la memoria del espectador. Lejos de ello, tan solo atisbo a unos personajes planos que rozan lo insoportable, una conversaciones banales que chirrían y una puesta en escena que no funciona.

Cierto es que mejora a medida que avanza, pero jamás llega a estabilizarse. La película divaga durante sus 90 minutos de duración intentando apoyarse en unos golpes de efecto que, en ocasiones, carecen de interés y resultan incoherentes. Además, los flashbacks no se introducen de la forma en la que debieran. Siempre permanece ese aroma a prefabricado, que asoma de nuevo en su final. Resulta una propuesta un tanto caótica y poco atractiva, aunque se esfuerza por intentar serlo.

Es de agradecer que cuente con algún momento aislado en el que se atisba conocimiento y lucidez, que nos demuestran que Chus es capaz de hacer películas infinitamente mejores. Recuerdo dos buenas secuencias en las que se muestra, de forma honesta y vívida, la pasión y el miedo que mueven a sus personajes. Precisamente, la pasión y el miedo son los dos pilares que intentan sustentar esta película.

ELLOS Y ELLAS

Las interpretaciones de los actores son la otra gran decepción de esta película. Quizás el margen que tengan sea escaso, ya que el guion les pesa en exceso, pero tampoco hacen nada por remediarlo. Sobreactuados y forzados, lejos de empatizar con el espectador, se inmiscuyen en ese aire telenovelesco que domina a la película.  Quizás Casablanc se salve de la quema, pero esto se debe únicamente a que su experiencia camufla las (enormes) debilidades en la construcción de personajes.

LA SORPRESA

La película se sustenta en las sorpresas. Quizás la más interesante e inesperada se produzca cuando ya ha pasado el ecuador de la película, y logrará dejar petrificado a más de uno.

LA SECUENCIA/EL MOMENTO

La escena en la que la pareja y la hermana del protagonista se encuentran juntos en la piscina dará que hablar, y está dirigida con oficio y tensión.

TE GUSTARÁ SI…

Si te gustan las telenovelas que no se centran tanto en que las cosas se acerquen o se parezcan a la realidad, sino que se encuentran en la búsqueda de un golpe de efecto que mantenga al espectador entretenido.

LO MEJOR

• Alguna que otra escena que demuestra que Chus Gutiérrez puede hacer cosas mucho mejores.
• La película mejora a medida que avanza.
• Pedro Casablanc.

LO PEOR

• La sobreactuación.
• La puesta en escena.
• Lo banal y superficial de los diálogos.
• El aire telenovelesco que jamás desaparece.
• El poco efecto que tiene alguno de sus momentos clave.
• Su escena final.

Jorge G. Leguina