Tras lograr un éxito arrollador con su primera y segunda temporada, Hierro es a día de hoy una de las series más vistas y adictivas de Movistar+ (y además está en nuestro top series 2021). El próximo jueves, 19 de mayo, llega completa a la plataforma la nueva serie de sus creadores, otro thriller criminal dispuesto a hacer las delicias de los fans de la serie de Pepe y Jorge Coira. Rapa, una producción de Movistar+ y Portocabo, cuenta con las incorporaciones de Fran Araújo como creador y guionista, y Elena Trapé, que dirige la mitad de episodios. Tiene como protagonistas a Mónica López y Javier Cámara, y como telón de fondo, Galicia. El Festival de Málaga proyectó su primer episodio en primicia, y en la redacción ya hemos podido verla al completo. Sin más dilación, os hablamos de ella.

La tierra, tira

Si en Hierro se escribía un crimen en la «última» isla del archipiélago canario, en Rapa los hermanos Coira retornan a sus raíces, zambullendo al espectador en la Costa da Morte. En concreto, los neblinosos acantilados de la sierra de A Capelada albergan el ojo del huracán que se traslada posteriormente a las localidades de Cedeira y Ferrol. Es en estos parajes en los que tiene lugar la tradición que da título a la serie. A rapa das bestas es una fiesta gallega que consiste en conducir hasta un cercado a los caballos que viven en esos montes, con el fin de cortar sus crines y así desparasitarlos. Una metáfora misma de la propia serie y algunos de los personajes que la habitan. Hasta aquí podemos leer.

A vista de pájaro y a pie de calle, Rapa lleva a la pantalla una Galicia que se aleja de los puntos turísticos más explotados, dando como resultado una verosimilitud que cala en los huesos tanto como el ambiente que se nos transmite. La costa gallega se siente en cada fotograma; son los paisajes, es el clima, son sus gentes. Rapa es una de esas ficciones en las que, por manido que pueda sonar, es inevitable aludir a la localización como un personaje más. 

Los extraños aliados

La serie arranca con el hallazgo de una mujer herida de muerte en la sierra. La encuentra Tomás (Javier Cámara), profesor de Literatura en el instituto, y como único testigo, se convierte en pieza clave para Maite (Mónica López), la sargento de la Guardia Civil a quién se le encomienda el caso. ¿La mayor intríngulis del mismo? La víctima era Amparo Seoane, la alcaldesa de Cedeira. 

Rapa nos plantea una dupla investigadora muy de novela negra moderna, rompiendo el canon clásico de una pareja de protagonistas que se dedican profesionalmente a resolver crímenes. Maite lo hace, pero Tomás por el contrario es un simple ciudadano de a pie, y se vuelca en esclarecer los hechos poco más o menos que por amor al arte, o quizás porque atrapado en una vida no muy agradecida, encuentra cierto fin lúdico en participar de una historia como las que ha leído cientos de veces en la ficción. El hecho de que no sea policía lo acerca más al espectador, así como su aura de recién llegado favorece a que vayamos descubriendo a la par que él y que Maite (que tampoco es oriunda de Cedeira pese a llevar tiempo viviendo allí) el entramado de relaciones que unía a los vecinos de la localidad gallega de una forma u otra con la alcaldesa. 

Se confirma una vez más el buen hacer de Javier Cámara en todo proyecto que toca, pero también es de destacar lo grato que es volver a encontrarnos con Mónica López (que ya estuvo en Hierro), en un papel que nos vende a la perfección y desde un punto muy natural. La química entre los actores es un sí, y la conjugación entre los personajes funciona, especialmente por la dinámica de retroalimentación en la investigación. Sin embargo, a medida que la serie avanza, el guion comienza a jugar con difuminar ciertas líneas y esto es  probablemente lo que menos nos convence de la propuesta. 

El porqué por encima del quién

El reparto de Rapa se nutre de actores y actrices gallegos como Lucía Veiga, Eva Fernández, Toni Salgado, Ricardo de Barreiro, Berta Ojea o Santi Prego para componer su galería de secundarios. Hablamos de una serie de personas que viven en un pueblo donde todos se conocen entre sí, y donde se cuecen tira y aflojas familiares, sociales y políticos, aunque la ficción finalmente no ahonda ni saca demasiada chicha de esto último, a pesar de ser la mismísima alcaldesa la asesinada (cosa que podría haber dado mucho juego). 

El objetivo final es descubrir quién es el culpable, y sobre todo cuál fue su motivación. Rapa no es una de esas series que se dedican a marear al espectador pasando las sospechas de un personaje a otro con cada pestañeo, más bien revela la carta maestra muy pronto y de ahí en adelante va aportando nuevas piezas de información para que al final quede completo el puzle y podamos comprenderlo. Una jugada tan infrecuente como arriesgada, aunque a rasgos generales el truco funciona. Rapa tiene claro lo que quiere contar y cómo llegar hasta ello, y hay que reconocerle que consigue mantener la atención del espectador de principio a fin, algo que nos atreveríamos a decir, tiene en parte que ver con su acertado formato de solo seis capítulos, huyendo de posibles rellenos. Con todo, y aunque se ha promocionado como miniserie, Rapa nos deja un final bastante realista y que a su vez podría dar pie a una continuación como ya ocurrió con Hierro. Por de pronto, si tiene una buena acogida, el equipo no se ha cerrado a quedarse en Cedeira un poco más.

¿Dónde y cuándo?

• Fecha de estreno: 19 de mayo de 2022
• Plataforma de emisión: Movistar+
• Número de episodios: 6
• Duración aproximada: 50 minutos
• Te gustará si te gusta: La novela negra o las series policiacas 

Aitziber Polo