Las series de televisión, como la vida misma, están destinadas a evolucionar. Y si dicho producto se centra en los quebraderos de cabeza de unos padres primerizos, resulta realmente lógico que la evolución natural de la misma sea pasar por diferentes estados. De lo contrario, no nos la creeríamos. O ya habríamos visto tantas veces la misma historia contada de tan diferentes maneras que nos daría exactamente igual si el personaje se ha roto una pierna, ha tenido un hijo o lo ha perdido.
Pero esto no ocurre con la segunda temporada de Mira lo que has hecho, la ¿ficción? creada por Berto Romero para Movistar+ que estrenó su primera tanda de episodios el pasado año y el próximo 22 de febrero, llega con su segunda. Escépticos fuimos muchos con el anuncio de esta nueva remesa de episodios, probablemente como reacción esperable de todo seriéfilo que disfruta con una temporada que se le antoja redonda y tiene miedo a que lo venidero no esté a la altura. Pero, una vez más, esto no ocurre con la segunda temporada de Mira lo que has hecho.
El equilibrio (im)perfecto de una relación
Lo que sí ocurre es que la serie producida por El Terrat ha vuelto a dar con el mismo clavo que en su primera temporada y ha sabido reflejar la vida de unos padres primerizos que ahora se enfrentan a un segundo embarazo (¡doble!) de la manera más realista posible. Porque para productos felices en esta línea ya tenemos las sitcom de los 90, y para dramas insufribles los del cine de sobremesa de los fines de semana: en el equilibrio está el gusto y Berto Romero lo ha tenido muy claro desde el principio con Mira lo que has hecho.
Sin perder la frescura que le caracterizó en su primera temporada, la serie continúa siendo un fiel reflejo de todo lo bueno y lo malo que puede acontecer en la vida de una pareja joven que ha de lidiar con un hijo, con un embarazo, con trabajos que les comen todo el tiempo y con esa sensación de querer cuidar una relación y no saber (o no poder) hacerlo. Esta trama principal, que sirve además al creador para realizar una sutil crítica a la situación de muchos matrimonios hoy en día donde es sobre la mujer sobre quien recae el peso de prácticamente todo (tenga o no un motivo para ello), viene acompañada de subtramas que exploran otros tantas situaciones presentes en la sociedad: nuevos tipos de relaciones amorosas, madres solteras, la educación de hoy en día… Un buen puñado de pequeñas dosis de realidad en las que la ficción ha querido reparar, aunque es cierto que en muchas ocasiones se queda corta. Y es palpable que el hecho de no profundizar lo suficiente no es por falta de voluntad, pues se aprecia desde el minuto uno que la serie queda bien lejos de sentirse encorsetada; sino porque encapsular todo lo que se puede contar sobre cualquiera de estos temas en seis capítulos de algo menos de media hora no debe de ser nada sencillo. ¿Aspecto positivo? Si se nos quedan cortas las tres horas es porque la cosa está saliendo bien, muy bien. Y cuando nos acercamos hacia la mitad de la temporada… mejor, mucho mejor.
De viejos conocidos a nuevas incorporaciones
A Berto Romero ya muchos le admirábamos desde hacía tiempo por su buen hacer en cualquier plató de comedia, pero el trabajo de Eva Ugarte era bastante más desconocido para muchos hasta llegar a Mira lo que has hecho, y si en la primera temporada ya estábamos seguros de que su fichaje había sido todo un acierto, en esta podemos darlo más que por sentado. Desprende realismo tanto cómico como dramático (algo que también consigue Berto, aunque con él nos cueste un poco más de creer por esa vis cómica que tan asimilada tenemos) y la química que tiene con su compañero de reparto es prácticamente intachable. ¿Tendrá este año los reconocimientos que se merece?
Quien sí nos resulta un rostro más familiar desde hace unos años es Belén Cuesta, que se une a esta segunda temporada para hacer de sí misma y aparecer en la serie que el personaje de Berto (o sea, Berto) prepara en la serie. Junto a ella, Nuria Gago, a quien ya muchos echábamos de menos en la pequeña pantalla nacional y que, quizá un poco en detrimento de Rosa (la hermana del personaje de Ugarte, a quien da vida Anna Carreño), llega para ser la confidente de Sandra. Dos incorporaciones, y nuevamente, dos aciertos.
Mira lo que has hecho vuelve a su peculiar mezcla de comedia con drama haciendo algo más de hincapié en el segundo género, lo cual resulta natural si pensamos que es precisamente el mismo hincapié que la vida podría hacer en recordar a cualquier pareja que se está enfrentando a su segundo embarazo en poco tiempo y que, con trabajos asfixiantes y rencillas que van surgiendo del día a día, va a tener que luchar para seguir adelante con todo. Así fue el realismo que hizo funcionar a la producción durante sus seis primeros episodios y va a ser el que lo consiga, también, en los seis que nos trae el próximo 22 de febrero. Y, si sigue de esta manera, en todos los próximos seis capítulos que nos quiera seguir trayendo.
Silvia Martínez
Mira lo que has hecho: Temporada 1
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