La pandemia pilló a Jon Sistiaga por sorpresa. Inmerso siempre en pilas de trabajo, nunca se esperó que sus ideas y proyectos tuvieran que ser pospuestos indefinidamente por un virus originado a miles de kilómetros de aquí. Pero lo que jamás se le pasó por la cabeza fue que casi seis meses después se encontraría en el FesTVal presentando su documental Miedo. Repitiendo con Movistar + y bajo el sello de La Caña Brothers acude a Vitoria para presentar las dos caras de una de las emociones más básicas del ser humano.

«El miedo ha sido lo único que nos ha unido a todos como sociedad.» Sin tapujos y con una visión clara, Sistiaga, natural de Irún, comenzaba así sus declaraciones. «En muchos casos paraliza, pero funciona como una herramienta. El miedo nos hizo confinarnos, evitando contagios, pero también revolvió en lo peor de las personas. Ejemplo de ellos son los trolls de internet o los bautizados como policías de balcón. Aun así no hay que olvidar esa cara luminosa por la que trabajadores y sanitarios lucharon casa día.»

Luz y Ocuridad

Por esta razón, no es baladí que el documental cuente con dos episodios. El periodista admite que mostrar ambas caras era necesario. «Vamos a ver unas historias, que aparte de hacernos debatir, nos harán pensar sobre esos conceptos entre los que se debate el miedo, la luz y la oscuridad.» A través de varios testimonios, Sistiaga analizará la labor de profesionales que han sido clave a lo largo y ancho de este escenario apocalíptico.

Con un tinglado de tan grandes proporciones, la gramática audiovisual cobra vital importancia. Escenarios clave durante el estado de alarma se convierten en los emplazamientos de unas entrevistas cargadas de sensaciones post-pandemia. Con un trabajo de fotografía amplio y cargado de emoción, el irundarra celebra la labor de la productora.  «El trabajo de La Caña Brothers han sido brutal ya que refleja la magnitud del vacío que nos ha dejado esta pandemia. La presencia de la ausencia. De ahí, que hallamos recurrido a lugares tan clave como el palacio del hielo o IFEMA.»

Reflejo del pasado

Continuando con la importancia de las localizaciones, Sistiaga es incapaz de contener su entusiasmo por haber rodado en el Museo del Prado. Para él es un retrato veraz del paso del tiempo. “Uno de los espacios que más nos interesaba y que pienso que cuenta la historia de la humanidad es el Museo del Prado.» 

Además allí, se encuentra la obra de Goya, que ha sido esencial para el proyecto. Acorde al profesional, el pintor fue el primero en mostrar verazmente los miedos de la sociedad española. «Goya es el primer fotoperiodista que hay en España y los desastres de la guerra un reflejo claro de la situación actual. Un ejemplo claro es su grabado N°49, titulado enterrar y callar. Ya iréis viendo más relaciones evidentes cuando se estrenen los episodios.»

El negacionismo

Lejos de convertirse en un documental únicamente de entrevistas, Miedo busca también conocer los orígenes de esta sensación intrínseca en el ser humano y por ende, todo lo que ello acarrea. Aunque parezca algo actual, el negacionismo es un efecto directo y arcaico de esta sensación. Jon tiene clara su postura. «El negacionismo es un movimiento que asistido toda la vida y en todas las sociedades. Últimamente, lleva unos años que está mejor armado. A través de redes sociales como Facebook o pequeñas quedadas, hacen crecer a un movimiento unitario que no tiene jefes, ni dueños. Son una amalgama de cientos de mentalidades e ideas diferentes.»

«En el capítulo de luz hay alguien que habla de esta problemática. Y cuenta, lo difícil que es tratar con alguien que no quiere atender a razones.” El periodista añade como la manera en la que nos relacionamos con ellos es importante. “Lo que no se puede hacer con un negacionista es tratarle desde la soberbia o la condescendencia. La risa o la ironía resultan inútiles frente a una mentalidad que basa sus principios en una sola creencia. Solo contrastando se podrá llegar a un diálogo en el que cambien de opinión, ya que ellos mismos no tiene una teoría alternativa.»

«El beso a una amiga puede ser el abrazo de la muerte para una madre.» Con estas palabras, Sistiaga recordaba ese miedo que le incitó a observar y grabar. Ahora, con su estreno previsto para el 17 de septiembre, piensa que el miedo se ha perdido. «Si hubiera una continuación, no podríamos llamarla igual. Seguramente habría que llamarla de otra manera, el miedo ya lo pasamos. Si finalmente hay una segunda ola, habrá que ver la relación que tenemos con ella respecto a la primera. Incertidumbre no sería un mal nombre.»

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