ANTECEDENTES

En este ecuador del festival de cine de Barcelona, hemos gozado de una película como La casa, hemos visto impecablemente actualizada y adaptada la obra clásica catalana Escanyapobres y hemos reído con Disco, Ibiza, Locomía. En esta jornada del BCN FILM FEST nos adentramos con la nueva película de un director que, tras su ópera prima inicial, Descarrilados (2021), nos regala una película simpática con la que disfrutar una tarde en el cine. Conxita Casanovas, directora del BCN FILM FEST, dijo en su presentación que qué sería de un festival sin su comedia, por lo que aquí hablaremos de la nueva comedia del director Fer García-Ruíz.

LA PELÍCULA

Pepe (Arturo Valls) es una gran persona muy querida en su barrio. Su paciencia y amor rozan lo insultante, pues todos se aprovechan de su buen hacer, pero su mujer Sagrario (Malena Alterio) vive felizmente con él hasta que un día a Pepe le diagnostican una enfermedad terminal. Con un gran amor por la vida y por los seres queridos que le envuelven, sean estos familias o vecinos, Pepe decide convertirse en una mala persona, en la peor persona del mundo, para que nadie le recuerde cuando se vaya y todos esos seres queridos vivan felizmente su marcha. No sabrá, sin embargo, hasta qué punto la paciencia y el amor de Sagrario estarán por encima de su plan cuando quiere que las cosas salgan realmente mal.

Mala persona es una película agradable dentro de estos días de festival. La comedia que nos brinda Fer García-Ruiz no pretende ir más allá de la risa que provee y con ella pasamos un buen rato. Sin embargo, el tipo de humor que destila la película y que en ocasiones roza o entra de lleno en lo sórdido, lo traumático, lo extremadamente absurdo o lo escatológico, puede no ser plato de buen gusto para mucha gente, especialmente para todos aquellos amantes del cine español que piden ya una comedia española distinta a la que nos tiene acostumbrados nuestro cine en los últimos quince años, tales como las constantes comedias familiares de Santiago Segura, el “cuñao” español llevado al extremo o la desubicación cultural de los ocho apellidos más rentables de la historia del cine español. Mala persona es simpática y divertida y, aunque el guion original plantea una inteligente disyuntiva, no dejamos de visitar lugares comunes de la comedia española de los últimos años que piden a gritos una revisión.

No sería justo decir que Mala persona es una comedia barata y poco hecha, pues son muchos los puntos fuertes de esta propuesta empezando por su argumento original y acabando por toda una ristra de actores y actrices que bordan sus papeles, especialmente el buenazo de Pepe con el rostro paciente de Arturo Valls y la también paciente y comprensiva Sagrario con el rostro de una Malena Alterio camaleónica como ella sola. La película es divertida, sabe, incluso, ser escandalosamente divertida cuando se lo propone, y las múltiples situaciones reproducidas por el buen o mal hacer de Pepe recrean mil y un escenarios que no se agotan, pero no dejamos de ver algo que ya vimos hace mucho tiempo.

Mala persona es capaz de gustar, pero no de enamorar, quizás porque hace ya tiempo que los espectadores pedimos más carne en el asador de la comedia y que nos ofrezcan algo realmente original. Se echan de menos comedias no fáciles, aquellas que son capaces de arrancarte carcajadas sin necesidad de recurrir a tropos ya trillados. Mala persona te hará pasar una buena y divertida tarde de cine, pero puede que sus chistes desaparezcan esa misma noche.

ELLOS Y ELLAS

Pese a que el gran peso de la trama lo lleva Arturo Valls (Dos años y un día, Camera café, la película) en la piel de Pepe o Malena Alterio (Strangers, Que nadie duerma) en la piel de su esposa Sagrario, hay muchos más actores y actrices que los acompañan, como José Corbacho (Un nuevo amanecer, ¡Martita!) haciendo de José Corbacho en el papel del Padre Héctor o Julián Villagrán haciendo de Juanjo, mejor amigo de Pepe. Si de plantel actoral hablamos, quizás sean los muy secundarios los que acaban llegando al punto de los dos actores principales, como Betsy Túrnez (Mano de hierro, Jo mai mai) en su breve papel de doctora o Dafnis Balduz (La mirada de la Fiona, La Mesías) en su también breve papel de banquero.

LA SORPRESA

• Que comedias como estas sigan aguantando en carteleras.
• Que Dafnis Balduz puede llegar a ser tan turbio como divertido en cualquier papel brevísimo que se le plantee.

LA SECUENCIA/EL MOMENTO

• El final, cuando Pepe se dispone a recuperar a Sagrario.
• Todos los momentos en los que Betsy Túrnez aparece en la pantalla. Impagables.

TE GUSTARÁ SI…

• Aprecias el trabajo de Malena Alterio y Arturo Valls.
• Te gusta la comedia española de situaciones absurdas.

LO MEJOR

• Una propuesta simpática que no busca nada más allá del entretenimiento.
• Arturo Valls y Malena Alterio, como siempre.
• Que lo realmente imprevisible de la película sea cómo la nueva ocurrencia de Pepe va a ser contestada por Sagrario, abriendo así nuevas brechas que habrá de atravesar agradablemente la trama.

LO PEOR

• Un humor pasado con demasiada brocha gorda que puede ahuyentar a demasiados espectadores.

Javier Alpáñez