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10 PELIS QUE NOS ENSEÑARON LA MALDAD INFANTIL

Tener hijos es una de las cosas más hermosas que se pueden hacer. Ver crecer a esas pequeñas criaturas adorables y educarlas para formar grandes personas es la mayor ventaja que tiene la humanidad… aunque no siempre sale bien. Al fin y al cabo, vivimos en un mundo que ha necesito inventar a Supernanny. La maldad infantil se ha visto reflejada en varias ocasiones en el cine, y está semana veremos una versión oscura de Superman en El Hijo. Para celebrar su estreno, hemos preparado un especial con nuestras 10 pelis favoritas sobre niños que se merecen un buen castigo.

LA PROFECÍA

A dos años de firmar Superman, película en la que un niño del espacio sí se portaba como debía, Richard Donner nos presentó otra clase de infancia. La Profecía es una película importante si te estás planteando tener hijos, y es que nos enseña distintas formas de darte cuenta de que tu niño está poseído por el demonio. Por ejemplo, que la niñera se suicide en el cumpleaños del pequeño no es demasiado normal. Y si luego un cura te advierte del peligro y posteriormente muere en un accidente de coche, no dudes más. Tu hijo, al igual que Damien, es el Anticristo. Esta idea didáctica es una de las muchas virtudes de la película de Donner, un clásico del terror que dejó huella en muchas generaciones posteriores.

TENEMOS QUE HABLAR DE KEVIN

Kevin Khatchadourian tiene dos graves problemas: Un apellido extremadamente difícil de pronunciar y haber matado a unas cuantas personas. La historia de Tenemos que hablar de Kevin hiela la sangre rápidamente, y es que narra la vida de un niño que desde el principio parece sentir una fuerte repulsa hacia su madre y el resto de seres vivos. La película nos enseña que si tu hijo tiene características de un sociópata, no es buena idea regalarle un arco. Y hasta llegar a esa conclusión vivimos todo un viaje sensorial de la mano de la siempre genial Lynne Ramsay, una de las directoras con mayor personalidad audiovisual de la actualidad.

LOS NIÑOS DEL MAÍZ

Seis secuelas, una precuela y un remake. Todo eso salió de Los niños del maíz, adaptación de un relato de Stephen King que contaba la historia de un pueblo de Nebraska donde los niños asesinan a todos los adultos para entregarlos como sacrificio a su Dios. Si algo podemos aprender de la película debut de Fritz Kiersch es la facilidad de los niños para ser influenciados, hecho del que no debemos aprovecharnos para hacer el mal (ni rituales ni sacrificios, por favor). Pero, quizá, manipularles un poco para que pongan la mesa no tenga nada negativo. Seguro que King lo aprobaría.

¿QUIÉN PUEDE MATAR A UN NIÑO?

Con solo dos películas y una serie mítica (Historias para no dormir), Narciso Ibáñez Serrador se convirtió en una figura clave para toda una generación de futuros cineastas. El terror español no se entendería de la misma forma sin ¿Quién puede matar a un niño?, obra maestra donde dos adultos viajan a una pequeña isla donde solo hay niños. Su banda sonora pasó a la historia, el terror que presentaba daba verdadero pavor, y la película se atrevía a cosas sorprendentes teniendo en cuenta su año de estreno (1976). Una película que hay que revisionar cada poco tiempo, pues siempre hay nuevos detalles a admirar en la dirección de Serrador.

EL BUEN HIJO

La maldad infantil se personifica en Macaulay Culkin, un peligro andante. El niño rubio más famoso del cine ya demostraba en Solo en casa que era un pequeño psicópata dispuesto a lanzar pesados botes de pintura a la cabeza de sus enemigos, pero aquello solo era el principio. En El buen hijo interpreta a Henry Evans, un niño ejemplar y cariñoso que oculta una faceta retorcida y perversa que le hace capaz de intentar asesinar a su hermana y su madre. El aprendizaje que podemos sacar de este thriller del director de Durmiendo con su enemigo, es que si otro niño se da cuenta de que a tu hijo le pasa algo raro, deberías escucharle. Y si ese niño es Elijah Wood, futuro portador del anillo, con más razón.

EL ORFANATO

J.A. Bayona, heredero como otros tantos de Narciso Ibáñez Serrador, debutó en el cine con El orfanato, carta de presentación que le valió 7 premios Goya y una inmensa fama que no tardó en crecer y llevarle a Hollywood. La película, protagonizada por Bélen Rueda, nos habla de un niño que se deja llevar por su imaginación hasta puntos… tenebrosos. Aunque finalmente nada es lo que parece en el fantástico guión de Sergio G. Sánchez (que debutó en la dirección con El secreto de Marrowbone, también protagonizada por jóvenes), durante gran parte de la película podemos comprobar como no es bueno pasarse de imaginativo.

LA HUÉRFANA

Jaume Collet-Serra, uno de los españoles más prolíficos de Hollywood, causó sensación con esta película de terror sobre una pareja que, tras perder al bebé que estaban esperando, adoptan a una extraña niña en un orfanato. El comportamiento de la pequeña Esther presenta múltiples similitudes con la mayoría de niños malos de esta lista, pero no queremos caer en spoilers de La Huérfana, ya que el factor sorpresa es vital en la película. Solo resaltaremos un hecho: se divierte matando palomas, síntoma precoz de la psicopatía. Así que si algún día veis a un niño divirtiéndose aplastando insectos (esperemos que no encontréis animales más grandes), tomadlo como un aviso. Y si veis La Huérfana, vais a aprender que debéis fijaros mucho mejor en el aspecto de los niños…

EDEN LAKE

Quizá no conocéis Eden Lake, película de terror independiente que causó sensación en su paso por festivales de género. Se podría definir como Magneto contra los adolescentes gamberros, y es que la protagoniza un espléndido Michael Fassbender junto a Kelly Reilly. Aquí el terror causado por unos adolescentes convierte una romántica visita al lago en un sonoro infierno. Porque es lo que tiene la maldad infantil, que es imposible viajar. El ejemplo más básico es el constante “cuánto queda” que oímos en el coche, pero en Eden Lake podemos ver opciones mucho más sangrientas que nos muestran porque no es bueno llevar a niños malos al campo.

ESCUELA DE JÓVENES ASESINOS

Para alejarnos un poco del terror, hemos dejado para el final dos comedias protagonizadas por jóvenes llenos de maldad. En Escuela de jóvenes asesinos (Heathers en su conocido título original) conocimos a una Winona Ryder que se enamora de un adolescente con pretensiones de asesino. Lógico, teniendo en cuenta que la única función de su grupo de amigas era realizar todo tipo de crueldades a sus compañeros de clase. Y es que el bulling es otro ejemplo directo (y lamentablemente muy real en todas las escuelas) de la maldad infantil. Aunque meterse un poco con el chico de la primera fila esté lejos de la actitud del personaje de Christian Slater en la película, es un primer síntoma de algo que puede degenerar en niños convirtiéndose en adultos horribles. Por otro lado, Escuela de jóvenes asesinos es una película diversísima con un fuerte espíritu de las comedias ochenteras.

CHICOS BUENOS

Para cerrar la lista, una que está por venir. El 23 de agosto se estrenará Chicos Buenos, la nueva película producida por Seth Roger que traslada el clásico humor de películas como Supersalidos, La fiesta de las salchichas, o la actual Casi imposible a la pre adolescencia. Brady Noon, Keith L. Williams y Jacob Trembay (que se pasa a la comedia tras dar la campanada con La Habitación) protagonizan esta película calificada para mayores de 18, lo que significa que no podrán verla en el cine. Eso sí, podrán admirar la ironía del título, ya que los niños que interpretan acaban metidos en un caso de tráfico de drogas, entre otras maldades.

Y estas son 10 películas que nos quitan las ganas de traer descendencia, ya sea porque representan al Anticristo, porque son rebeldes, o simplemente porque la maldad infantil corre por sus venas. Es mejor no jugársela. Compra un DVD, no una cuna. El cine nunca te hará daño.

Ignasi Muñoz

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