Fue la historia de Elio y Oliver la que le lanzó definitivamente a la primera línea. Un año después, y con la promesa de la segunda parte de Call me by your name, Luca Guadagnino sorprendía con el remake de una de las obras cumbres de terror. Llegaba así esta versión de Suspiria, quizá la gran representante del giallo, y sobre la que pudimos conversar con Jorge Loser.

Poco queda de aquel fantástico guion de Dario Argento y Daria Nicolodi. Lo que en la original de 1977 era un enigma indescifrable pendido de un suspense místico, aquí parece limitarse a unos pasos de baile y una historia mucho más laxa. Todo resulta confuso, no hay misterio, y sólo queda de su predecesora la sangre (en mucha menor medida), los colores exagerados y las brujas. A destacar: los movimientos de cámara (sobre todo al principio), el sonido y los colores.

Los extras

Entre los extras encontramos el tráiler de la película y dos entrevistas, una Luga Guadagnino y Tilda Swinton, y otra con Dakota Johnson, la protagonista de esta nueva versión de Suspiria. En la primera de ellas, el director y una de las actrices destacadas hablan de lo mucho que llevaba planeándose esta película en la cabeza del italiano: “desde que nos conocimos, hace 25 años”, asegura Swinton.

Guadagnino no puede ocultar la fascinación que siente por su compatriota en general, y por esta película en particular. Aunque, en fin, tampoco lo intenta. Cuenta que se enteró de que Argento había dicho que su película era feroz y la de Luca era delicada, y que en su caso pensaba exactamente igual, pero al revés.

De la charla con Dakota Johnson extraemos el reto que supuso para ella un papel tan exigente en lo físico, además del interés que le despertó la película una vez la vio, unido a la devoción que siente por Guadagnino.

Pablo Núñez Noriega