FECISO CELEBRA SUS VEINTE AÑOS
FECISO, el Festival Internacional de Cine Social de Castilla-La Mancha, regresó una vez más a tierras manchegas para celebrar sus veinte años.
Veinte años apostando por el cine más independiente. Veinte años luchando por diferenciarse del resto mediante una serie de cortos, documentales y largometrajes que pretenden acercar al público un cine más social y educativo. En palabras de Tito Cañada, el director de FECISO: “Creemos que a través del cine llegamos o impactamos mucho más con todas esas realidades sociales”.
Temas universales como la salud mental, el acoso, la violencia de género, la desigualdad o la inmigración son los protagonistas de las historias que se han podido ver a lo largo de estos nueve días de proyecciones a través de los veintidós cortometrajes seleccionados. Ava, de Mabel Lozano, Inheritance, del francés Matthiu Haag, o Tonser, procedente de Dinamarca y dirigido por Marta Salavdor, son algunos ejemplos.
La gala de clausura, que tuvo lugar en el Teatro Rojas este pasado domingo, fue la encargada de anunciar los ganadores. Una elección difícil teniendo en cuenta los 1080 trabajos recibidos en la sección de concurso. Sin duda, la noche estuvo llena de emociones, comenzando con un mensaje reivindicativo de Tito Cañada: “Hacen falta muchas manos para poder avanzar en esa lucha por la igualdad y en esa lucha por los derechos sociales de todos y de todas”.
La actriz Mireia Oriol se llevó el Premio a la Mejor Interpretación Juvenil por su papel en Alegre y Olé, de Clara Santaolalla. Un cortometraje que visibiliza el suicidio, una de las primeras causas de muerte no natural entre los jóvenes. El propio corto de Santaolalla también se llevó el galardón “UCLM” otorgado por los estudiantes universitarios. Maruja, de Berta García, recibió el Premio Biblioteca Solidaria por mostrar, desde la comedia, la historia de tantas mujeres de la posguerra que trabajaron muy duro para salir adelante.
El Primer Premio de Cortometrajes fue para Cementerio de coches, de Miguel Ángel Olivares, protagonizado por los pequeños Asier Flores y Youssef Bougarovaney. Por su parte, Mabel Lozano, se llevó el Primer Premio de Documentales, con su cortometraje Ava, sobre la trata de blancas. “No seamos cómplices de esa esclavitud”. Sin duda, la toledana fue la gran protagonista de la noche al recibir también el premio Solidaridad, por su gran trabajo de denuncia social y defensa de la mujer que lleva a cabo a través de sus documentales.
Además, La Fundación Lumière entregó su medalla al actor Máximo Valverde por su aportación profesional al Séptimo Arte. Por último, los actores Juanma Lara y Petra Martínez recibieron conjuntamente el premio a Toda una vida de cine. Una emocionada y agradecida Petra Martínez volvió a dar una vez más un discurso inolvidable. Con la guerra de Gaza de fondo, la actriz declaró su deseo de que todos luchemos para acabar con todas las injusticias que hay en el mundo.
Sin duda un festival muy necesario que busca reflejar y representar todas las realidades sociales que habitan en nuestro planeta.