57 EDICIÓN DEL FESTIVAL DE SITGES. SECCIÓN PELÍCULAS: APOCALIPSIS Z. EL PRINCIPIO DEL FIN
ANTECEDENTES
En 2017 el escritor Manel Loureiro publicó Apocalipsis Z: el principio del fin. Ambientado en una Galicia arrasada por un virus que transforma a la gente en seres violentos e irracionales, el libro fue un éxito que poco tardaría en verse reconocido en película. En este cuarto día del Festival de Sitges 2024 y tras nuestra primera crítica con la película Infinite Summer traemos en pantalla grande la adaptación del célebre libro con el director Carles Torrens tras las cámaras. Tras los mandos de la película Animal de compañía (2016) y la dirección de algunos capítulos de series como El Internado: Las Cumbres (2021), Sky Rojo (2023) o Citas Barcelona (2023), Torrens llega a las salas de Sitges con esta propuesta de cine de zombies en un escenario bien conocido.

LA PELÍCULA
Un año más tarde de la muerte de su esposa, Manel (Francisco Ortiz) asiste atónito a cómo la sociedad entera se derrumba ante el avance imparable de un virus que se extiende como la pólvora en todo el mundo. Su hermana, casada con un militar, le pide que viaje con ellos a las Canarias, donde parece que la situación está bajo control. Cuando a punto está de tomar el avión rumbo al archipiélago, las comunicaciones se detienen y Manel queda atrapado en la casa de su urbanización a la espera de que la calma y la normalidad regresen al lugar, al país y al mundo entero. Acompañado de un fiel gato y con las provisiones menguando, Manel tendrá que decidir salir al mundo para sobrevivir, encuentre lo que encuentre en ese exterior.
Apocalipsis Z: el principio del fin plantea diferentes envoltorios, pero con un mismo fondo. Es una película interesante que muestra unas cartas distintas tales como lo que encuentra Manel dentro del bote junto a la riba, la presencia constante del gato, el hecho de encontrar una historia de zombies en plena Galicia o una forma curiosa de evitar las mordeduras de los infectados. Sin embargo, pese a que el envoltorio es distinto sólo en algunos aspectos, Apocalipsis Z: el principio del fin vuelve a ser una película clásica de zombies que aporta poco al género.
No queremos expresar con esto que la nueva película de Carles Torrens no sea entretenida, pero quizás su argumento navega entre espacios bastante trillados y a veces queda anclado en una trama que promete ser más de lo que inicialmente planteaba. Apocalipsis Z: el principio del fin cumple sobradamente en su objetivo de llevar a la gran pantalla un libro que fue un éxito y plantear aspectos interesantes que quizás no se han visto en películas anteriores, pero el producto final no llega a brillar del todo en una época donde el cine de zombies e infectados se ha hecho tan popular que cualquier nuevo estreno ha de ser mirado con lupa para ver si aporta algo nuevo. La película de Carles Torrens entretiene, pero no enamora. Pese a ello, se convierte en la mejor forma de realizar la liturgia de una tarde de cine en una sala a oscuras, puesto que será una experiencia harto disfrutable.

ELLOS Y ELLAS
El peso principal de la película cae en Francisco Ortiz (Memento Mori, ¡García!), acompañado de unos secundarios como son la doctora que encuentra al final de la película en la cara de Berta Vázquez (Un hípster en la España vacía, Bienvenidos a Edén) o Iria del Río (Los años nuevos, El bus de la vida) como la esposa fallecida de Manel.
LA SORPRESA
Que la adaptación del libro de Manel Loureiro haya sido tan bien trabajada.
LA SECUENCIA/EL MOMENTO
- El momento en que Manel entra en el bote con el que pretende marchar de la ría y encuentra allí lo que encuentra.
- El derrumbamiento de toda la sociedad, día a día, rápidamente mientras asistimos a algo que ya vivimos nosotros en nuestras propias carnes en 2020.
TE GUSTARÁ SI…
- Te gusta el género de zombies y disfrutas de una película palomitera de supervivencia.
LO MEJOR
- El gato, gran protagonista de toda la película.
- Un inicio de epidemia que nos recuerda mucho a lo que vivimos con el COVID-19.
LO PEOR
- Un ritmo un tanto deslavazado que a veces puede desconectar al espectador.
- Que algunas escenas o situaciones parecen no tener mucho sentido.
- Que los malos tengan que ser europeos del este, como siempre.
Javier Alpáñez