FESTIVAL DE SITGES 2016: THE NEON DEMON
Hay una serie de películas que son alabadas por el público y la crítica, y otras que hacen el efecto contrario y son muy odiadas. Sea como sea, son filmes que generan polémica tras ser vistos en el ciclo de festivales año tras año. Algunos de estos ejemplos pueden venir por parte de directores como Gaspar Noé con su Irreversible (2003) o Lars von Trier con Anticristo (2009). Este que vamos a ver ahora es también un claro ejemplo de lo que venimos diciendo, pero la gran pregunta es: ¿Por qué The Neon Demon generó esa polémica negativa en el Festival de Cannes? Porque en la 49.ª Edición del Festival de Sitges quedamos fascinados. La gran obra maestra no podía ser menos que del director danés Nicolas Winding Refn, un creador cinematográfico que nos ha traído joyas imprescindibles en la historia del cine como Drive en 2011 y Solo Dios perdona en 2013. Y, con esta, era ya la tercera vez que el director competía por la Palma de Oro. Muchas gracias, Nicolas, por no dejarnos indiferentes: The Neon Demon es otra de esas obras que tendremos que tener en nuestra filmoteca.
The Neon Demon habla de Jesse, una chica de 16 años que llega a Los Ángeles con el objetivo de conseguir llegar a ser una modelo referente del panorama y acaparar todas las miradas con su belleza. Las envidias que despierta, y el hecho de ser la nueva y la más joven entre sus compañeras veteranas en la élite de la profesión, no le pondrán muy fácil su acceso a este mundo de la moda, que tan inmerso se encuentra en la superficialidad.La ansiada belleza y la juventud, el llegar a hacer cualquier cosa por estar en la cima: zancadillas, sexo, modelos que se derrumban por no pasar castings en ropa interior y tacones… Todo vale: fuera la reputación y la humanidad y, cuanta más frialdad y poder se obtenga, mejor se ponen las cosas para conseguir su sueño. Todos estos son algunos de los interesantes planteamientos en los que profundiza The Neon Demon, una banalidad absoluta que Refn refleja y critica (que parece que algunos no se han enterado) en los 117 minutos de largometraje. Una fusión perfecta desde su guion, que, a pesar de no tener más vuelta de tuerca (no llega a la perfección argumental de Drive), en su final sorprende. A esto se le une la fotografía de Natasha Braier (The River), llena de formas geométricas y colores llamativos (rosas fuertes, morados, rojos, azules púrpura, blancos y negros, luces de neón…) en momentos psicodélicos, que conforma un perfecto mix cuando se une a la música del filme, compuesta por el gran Cliff Martinez (Premio a la Mejor banda sonora en Cannes por esta cinta), compositor que ha traído grandes temas en cintas como Traffic, Solaris o Drive. Canciones como Neon Demon, Mine, Waving Goodbye, Lipstick Drawing… son algunas con las que nos deleita en secuencias puntuales muy significativas a lo largo del largometraje.Tampoco podía dejarnos indiferentes su fantástico elenco actoral, que hace que la película sea un bombón de esos que quieres saborear de principio a fin. No entendemos qué hay de malo en tratar la superficialidad, y eso es lo que hacen Refn, Mary Laws y Polly Stenham en el guion de la cinta.
«No tengo un talento real, pero soy bonita; puedo hacer dinero por ser bonita». Esta es una de las frases célebres del filme dichas por su protagonista Jesse (Elle Fanning). La actriz está perfecta, refleja la inocencia, la belleza y la humildad y representa una presa perfecta para los tiburones que a su alrededor intentarán acecharla y devorarla, entre los que se encuentran Bella Heathcote (Orgullo+Prejuicio+Zombis) como Gigi o Abbey Lee Kershaw (Mad Max: Furia en la carretera) como Sarah. Por su parte, Jena Malone encarna a Ruby, la chica que en un principio ayuda a la pequeña en este camino, y Christina Hendricks (Mad Men) a Jan, una de las trabajadoras de la agencia de modelos. Entre el reparto de los personajes masculinos encontramos a Keanu Reeves (Toc, Toc) como Hank, en un pequeño papel algo agresivo pero correcto como dueño de un hostal; a Dean, el amigo y fotógrafo de Jesse, encarnado por Karl Glusman (Love), y a Desmond Harrington (El caballero oscuro: La leyenda renace) como Jack, el fotógrafo por el que todas quieren ser fotografiadas.La guinda del pastel la pone la sangre más perfecta que hayamos podido ver. Una sangre que no mancha, que no huele y que no es desagradable, sino todo lo contrario, con momentos surrealistas que conforman el crimen más bonito y limpio de toda cinta, a la que acaba convirtiendo en una auténtica y real pesadilla. Una película estéticamente perfecta, digna de observar al milímetro, que hace que la propia banalidad rebose brillo como las deshumanizadas modelos de la cinta. Miles de detalles que harán al espectador adulto reflexionar durante y tras la proyección de la misma.
¿Quién dijo que el demonio no podía ser realmente bello?
LO MEJOR:
- El guion crítico y su buena dirección.
- Una deliciosa banda sonora.
- Refleja el mundo de la moda.
- Su bella fotografía.
- El fantástico elenco.
LO PEOR:
- No saber ver la crítica que hace Refn.
- No valorar la belleza de la cinta.
María Páez
Para mí la película del 2016.
Estéticamente perfecta,con una critica hacia la superficialidad de la belleza escondida entre glamour, laca, maquillaje y sangre magnifica(y que por lo que he leído x ahí no todo el mundo ha sabido ver) ,con unas interpretaciones(sobre todo la de Jena Malone) merecedoras de un oscar(ya está bien que para que te den un Oscar tengas que hacer un papel en el cual el personaje tenga una enfermedad o una discapacidad)con más de cinco escenas que sé te quedan grabadas en la memoria porque son inquietantes y perturbadoras a más no poder y con una música que da la sensación que vino anexionada a la película sin necesidad de componerla.
No entiendo si vivo en otro mundo cinematograficamente hablando cuando leo críticas negativas hacia esta pelicula…No se que película han visto, aunque claro ellos se preguntarán lo mismo de mí
Lo que sucede es que yo tengo la respuesta en tres palabras.
UNA OBRA MAESTRA