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EL FESTIVAL DE CINE DE L´ALFÀS DEL PI REIVINDICA LA GRANDEZA DE LO PRESENCIAL

Técnicamente no es el primer festival de cine que se celebra presencialmente (se le había adelantado en la gesta el Barcelona Film Fest) pero da igual, su gala de inauguración se vivió como si lo fuera por todos los asistentes porque para ellos sí era el primero, el reecuentro, la reactivación, la reanudación del idilio que muchos echábamos terriblemente en falta.

El episodio COVID, un escenario que lamentablemente aún está lejos de estar superado, ha hecho trizas muchas sectores, y el cultural ha sido uno de los más perjudicados, porque básicamente sigue siendo uno de los más olvidados, ninguneados y atacados (sí, también atacado) injustamente en España. Si bien la alegría de la vuelta a los cines se extendió como toca siempre en las redes (mucho Hashtag y muchos aplausos pero a la hora de la verdad unas cifras muy modestas que revelaban un 90% de bajada en la taquilla frente a los últimos datos pre COVID), en estos días ya el tono ha cambiado para tornarse en indignación y protesta. Por un lado debido a la falta de sentido común en las medidas sanitarias tomadas por el gobierno (esas que nos permiten viajar en un AVE hasta la bandera pero no permiten más de un 60% de aforo en cines y teatros) y por otro lado también debido a esa decisión estelar de la Generalitat de cerrar los cines de Barcelona, que si antes de la crisis sanitaria perdía a los míticos Palau Balañá de Sants hace pocos días también recuperaba el luto cultural para despedir definitivamente a los cines Méliès, inaugurados en 1996. La cultura camina sola (y si esto no es así, desde luego lo parece). La cultura sobrevive como puede. Nada nuevo bajo el sol.

Por todo esto la entrada que el pasado sábado protagonizó Luis Larrodera en la Casa de la Cultura de Alfaz del Pi no solo rebosaba la energía habitual de un presentador que se mueve y se mantiene en cotas muy altas durante toda la gala, es marca de la casa, sino que también rezumaba mucha emoción y respeto por todo lo que el COVID nos está quitando. Con el tema de Jill de Hasta que llegó su hora arropando el momento, l´alfàs del Pi se volvió a alinear con la defensa de la cultura, y con una apuesta que lleva ya 32 ediciones sacando adelante un pequeño festival que suda pasión en cada uno de sus detalles, desplegando con mucha lucidez la modestia y la familiaridad necesaria para convertirlo en algo grande, y para atrapar de nuevo y bañar de memorias a cada uno de los invitados que en cada edición visitan la localidad para celebrar el cine.

FESTIVAL DE CINE DE L´ALFÀS DEL PI
El director del festival Luis Larrodera, junto a Pepe Viyuela y Anna Castillo, los Faros de Plata 2020

La actriz Anna Castillo y Pepe Viyuela son los Faros de Plata de esta edición y la magia de Luis Larrodera contó con la complicidad de la hermana de la actriz y Pedro Casablanc, uno de las apuestas más seguras con las que cuenta nuestro cine cuando hablamos de secundarios, amén de ese rol protagonista para el recuerdo en la valiente B, la película de David Ilundáin. El polivalente comunicador volvió a hacer su trabajo para entregarnos en el escenario a dos homenajeados visiblemente emocionados bajo el fuerte aplauso del público.

Momentos y pasajes vitales (y también muy vitalistas) que nos deben recordar que en una época en la que los festivales de cine encuentran en la red un escenario alternativo, no hay nada que pueda igualar lo que se experimenta en los eventos presenciales, aunque el aforo sufra restricciones. Porque el cine, el teatro, la música y la literatura en no pocas ocasiones, atesoran en la comunión directa y sin pantallas del autor con el público una de sus razones de ser. El encuentro y el calor humano vive su mejor versión en vivo y en directo. Y que estos pequeños festivales estén haciendo estos esfuerzos para mantenerse fieles a sus espíritus primigenios debe ser (y servir como) ejemplo para otras citas, sea cual sea su envergadura o categoría.

Tanto los homenajeados como Alejandro Ibañez, José Carabias, Carlos Urrutia, la actriz brasileña Clarice Alvés, Inma Pérez-Quirós y Rebeca Alemañy, ambas muy conocidas para el gran público gracias a su trabajo en Acacias 38, Germán Roda, Cristina Gallego y Ana Arias inolvidable Paquita en Cuéntame cómo Pasó, fueron algunos de los grandes nombres de la industria audiovisual que también estuvieron presentes en una gala que compaginó con mucho acierto y precisión el humor y la emoción. Rápida, ágil y de corazón. Una combinación contundente que no hace concesiones y sí muchos prisioneros.

FESTIVAL DE CINE DE L´ALFÀS DEL PI
El equipo de Urubú en el Photocall de la gala de inauguración

La Gala, que pasó como un suspiro entre aplauso y aplauso (hasta el aplauso a los representantes de las instituciones públicas fue sincero por su enorme implicación con este festival), dio paso a la proyección de Marcelino, el mejor payaso del mundo, una película documental que recupera la figura de Marcelino Orbés y que está cosechando muy buenas críticas e impresiones en estas sus primeras semanas de exhibición.

Y para todos, dos sensaciones muy sólidas: por un lado la seguridad que ofrecen los eventos culturales (seguridad y medidas higiénicas DE VERDAD) y la importancia, especialmente en el área cultura, del espectáculo en directo, presencial, del encuentro artista público, que no debe perderse ni relegarse, sino incentivarse, conservarse y defenderse. Con uñas y dientes si hace falta.

Ahora lo que queda por delante es una semana de cine que terminará el próximo fin de semana con la entrega de premios a los mejores cortometrajes en competición, una auténtica factoría de ideas en la que viven los que mañana firmarán los largometrajes que llegarán a nuestras carteleras. Y que la fiesta continúe. Y que el ciclo nunca se interrumpa.

Alfonso Caro

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Alfonso Caro Sánchez (Mánager) Enamorado del cine y de la comunicación. Devorador de cine y firme defensor de este como vehículo de transmisión cultural, paraíso para la introspección e instrumento inmejorable para evadirse de la realidad. Poniendo un poco de orden en este tinglado.