The Pelayos es una película del año 2012 que está inspirada en hechos reales. Cuenta la historia de los Pelayo, una familia que se organiza para poner en jaque a los casinos de todo el mundo, gracias a un método que han desarrollado para ganar dinero. Desconocemos si dicho método creado es también capaz de vencer a las mejores ruletas online disponibles en sitios como casinos-online.es. 

El director del film es Eduardo Cortés, un realizador que ha rodado mucha televisión y cuya mejor película hasta la fecha es La vida de nadie. Cortés grabó en el mismo año que The Pelayos otra película con ciertas similitudes: ¡Atraco! Pero esta película no resultó tan acertada como la que nos ocupa, puesto que su mezcla de géneros no termina de empastar de la manera adecuada.

La película cuenta con un reparto de campanillas. Daniel Brühl es el protagonista. Junto a él aparecen otros nombres consolidados del cine español como Eduard Fernández, al que es difícil pillar en un renuncio, o a Lluís Homar, un actor que acostumbra a hacer gala de una gran presencia y magnetismo en la pantalla. Vicente Romero es uno de esos actores que siempre garantizan interpretaciones brillantes —su interpretación del Maquea en la miniserie Padre Coraje quedará por siempre para el recuerdo en el imaginario colectivo—. Miguel Ángel Silvestre está más que correcto en su papel de guaperas. En la cinta también aparece una de las actrices jóvenes más mediáticas del momento: Blanca Suárez.

Reminiscencias de los chicos de Danny Ocean

La cinta recuerda a la saga de Ocean´s Eleven, la película de Steven Soderbergh que fue todo un éxito mundial y en la que actores de la talla de George Clooney, Brad Pitt o Don Cheadle se asociaban para desvalijar uno de los casinos más emblemáticos de Las Vegas, dirigido por el personaje al que daba vida Andy García.

En The Pelayos, Eduardo Cortés consigue plasmar ese espíritu burlón y desenfadado con un ritmo que no decae. El resultado es un buen producto de entretenimiento, una cinta que se ve con agrado y con disfrute, pero a la que le falta un poco de profundidad. Y decir esto no es restarle méritos, ya que cumple con su cometido a la perfección: hacer que el espectador lo pase bien. Desde luego no es la mejor elección para quien busca trágicos dilemas morales ni nada por el estilo, todo lo contrario: es una película fresca y dinámica, una producción con un estilo que no es muy habitual encontrar en el cine patrio, aunque es cierto que de un tiempo a esta parte, las películas y las series que se están haciendo en España tienen, por lo general, un aire diferente, renovado; son producciones que se atreven a probar un tipo de cine con más riesgo, películas que experimentan con géneros que hasta el momento habían sido poco explorados aquí.

En definitiva, The Pelayos es una excelente opción para todos aquellos espectadores amantes de los atracos y de los planes magistrales contados, por supuesto, con un tono divertido y ágil.

Redacción