El Palomitrón

Tu espacio de cine y series españolas

Leto-El Palomitron
CINE CRÍTICAS REDACTORES

LETO

Leto-El Palomitron

LOS ANTECEDENTES

La formación de una banda de música y su futura consagración y caída es una temática mil veces vista antes. De hecho, siempre da la sensación de saber lo que va a deparar a la historia en este tipo de películas. Aún así, a veces nos llegan verdaderas joyas de determinados países de este ya consolidado subgénero musical que hacen que sigamos manteniendo el interés en este tipo de cintas. El último ejemplo es Leto (Verano en ruso), la última cinta del director Kirill Serebrennikov (El discípulo) quien lleva desde un año bajo arresto domiciliario por malversación de fondos.

La película llega a las salas de cine con cierto retraso tras su paso por festivales de prestigio como el de Cannes, San Sebastián o Sevilla, cosechando grandes críticas en todos ellos. El film se presenta como una co-producción entre la productora rusa Hype Film y la francesa Kinovista.

LA PELÍCULA

Leto nos sitúa en plena efusión del punk y del rock en la ciudad de Leningrado a comienzos de los años 80. A simple vista aparenta ser una especie de biopic de Viktor Tsoi y Mike Naumenko, dos de los músicos más influyentes de la sociedad soviética de la época. El director fija su atención en la relación artística entre ambos músicos, y en especial, el triángulo amoroso que se va fraguando con la mujer de Mike. 

El film va más allá de ser un simple biopic para centrarse en la dificultad y restricción de libertad creativa de poder tocar un determinado género musical como es el rock and roll en un país como la Unión Soviética por considerarse algo propio del enemigo occidental. En contraposición, el director no tiene reparo a la hora de mostrar esa rebeldía y energía que caracterizaba a la juventud de la época. 

Aquí no destacan los conciertos y actuaciones de los protagonistas, a diferencia de otras películas de corte similar, sino las secuencias casi oníricas en las que tanto los protagonistas como la gente de a pie versionan famosos temas de David Bowie, T-Rex, Lou Reed, Iggy Pop o Talking heads. Estos momentos resultan tanto impredecibles y banales como fascinantes harán las delicias para todo melómano. Para acompañar a ciertas escenas musicales, hace uso de recursos vanguardistas como imágenes caseras o de archivo, insertos en color o la introducción de un personaje que actúa como intermediario entre la ficción y el espectador rompiendo la cuarta pared.

Emplea una fotografía bella y formal en blanco y negro con una clara inspiración del videoclip, recordando a títulos como las británicas Control (Anton Corbijn, 2007) y 24 hour party people (Michael Winterbottom, 2004). Es un film que dejará un buen sabor de boca, que si bien peca de repetitiva e irregular y se podría haber reducido en menos metraje, es capaz de contagiar la energía y nostalgia suficiente en una convulsa pero melancólica época en la que los jóvenes protagonistas vivieron intensamente y murieron demasiado pronto.

Leto-El Palomitron

ELLOS Y ELLAS

Ninguno de los actores protagonistas tiene una extensa carrera a sus espaldas. El trío amoroso formado por Roman Bilyk, Teo Yoo y Irina Starshenbaum son los que llevan el peso central de la trama. Roman Bilyk interpreta a Mike Naumenko, líder principal del grupo Zoopark. Teo Yoo, joven actor de ascendencia coreana, se pone en la piel de Viktor Tsoi, vocalista y fundador de la banda Kino. Ambos actores son capaces de dar una actuación algo intermitente y poco carismática, pero lo suficientemente vistosa como para que el público se interese por su historia, aportando más matices de los que se pueden apreciar a simple vista. 

Por otro lado, Irina Starshenbaum encarna a Natascha, la pareja de Mike. Ella hace que tanto el dúo de músicos protagonistas como el espectador queden prendados de su personaje. Desde la primera escena se destaca su cálida y acogedora interpretación, con una personalidad fuerte y compleja, siendo la trama la que se base en sus propias memorias. 

LA SORPRESA

La habilidad con la que el director es capaz de introducir en una historia no demasiado original elementos tan vanguardistas y rompedores al servicio de la música, así como la capacidad de separar de manera tan heterodoxa la  ficción de la realidad.

Leto-El Palomitron

LA SECUENCIA/EL MOMENTO

Cualquier secuencia musical en la que se versionan clásicos del rock y del punk son una auténtica maravilla. De todas ellas, si tenemos que destacar alguna por encima del resto es sin ninguna duda el momento del tren en el que interpretan el famoso tema Psycho killer del grupo británico Talking heads. Esta escena define a la perfección lo que simboliza el movimiento punk, rebeldía y libertad, frente a las reglas y censura predominantes en la sociedad de la época. 

TE GUSTARÁ SI…

Eres un amante de la música rock, especialmente la de la década de los 70 y 80. También te gustará si disfrutas con las películas sobre grupos musicales y sus entresijos dentro del mundo de la música.

LO MEJOR

  • La energía que es capaz de transmitir
  • La estética y sus números musicales 
  • La combinación entre videoclip y biopic autoral

LO PEOR

  • El trío amoroso no genera el interés necesario 
  • Puede resultar algo repetitiva
  • Algunas canciones no son lo suficientemente atractivas 

 

Aitor Gallego

 

¡No olvides dejar aquí tu comentario!

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Estudiante de Comunicación Audiovisual. Pronto encontré mi amor por el cine. También las series y la buena música, en especial el rock, me complementan. Creador y redactor del blog “Las ventajas de ser un crítico”. Quedé fascinado de aquel niño canadiense llamado Léolo que soñaba para no acabar loco.