EL MINISTERIO DEL TIEMPO: TIEMPO DE ESPLENDOR
El Siglo de Oro es la época favorita del ministerio y de sus espectadores. Y no es para menos, pues los grandes referentes de nuestra literatura y pintura, entre otras artes, vivieron en esta época dorada. Pero además, siempre que el Siglo de Oro es competencia de este ministerio sabemos que uno de nuestros personajes favoritos hará su aparición estelar: Lope de Vega (Víctor Clavijo).
España frente a Inglaterra
Y no, no hablamos de una competición deportiva, sino de uno de los tratados de paz más importantes que España tuvo en sus manos en el siglo XVII. Ponía fin a veinte años de guerra, aunque España siempre se sentiría herida por el ataque a la Armada Invencible. Pacino (Hugo Silva) y Alonso (Nacho Fresneda) tienen la misión de cuidar a los ingleses y hacer que ese acuerdo de firme.
Por otro lado, Amelia (Aura Garrido) será una de las damas de la reina, Margarita de Austria (Elena Rivera), la cual es acusada por su marido, Felipe III (Federico Aguado), de locura y de dejarse llevar por sus celos «sin motivo» hacia el duque de Lerma. Curioso cómo todas las reinas sufren estas acusaciones cuando sus opiniones no son las mismas que las de sus esposos.
Además de los oscuros intereses del duque de Lerma (Fernando Guillén Cuervo) por no firmar ese acuerdo, los rusos que pretendían raptar a Hitchcock en Con el tiempo en los talones pretenden asesinar al comandante Howard (Scott Cleverdon), I conde de Northampton, el encargado inglés de la firma del tratado.
El duque de Lerma: el patrón de los corruptos
La figura del duque de Lerma no solo incomoda a la reina Margarita, sino que los agentes del ministerio no comulgan con sus ideas, por decirlo de un modo más fino a lo que acostumbra a ser Alonso de Entrerríos. Amelia les pone al día de lo que el duque de Lerma desfalcó siendo el valido de rey, llegando a ser el más rico del reino.
Gracias a la patrulla, sobre todo a Amelia y su relación con la reina, el duque de Lerma recibe uno de sus primeros varapalos, aunque no será hasta tiempo después cuando la reina consiga que sea culpado por sus robos, de los cuales escapará ordenándose cardenal. ¡Con la Iglesia hemos topado!
Tiempo de Gloria para las letras: Cervantes y Lope
Tullido y asaltacunas: estos son los adjetivos que Lope y Cervantes (Pere Ponce) intercambian el uno con el otro. Todo esto candelabro en mano a punto de comenzar una riña que Amelia consigue detener y avergonzarlos, de paso, por su comportamiento pueril. Dos de los grandes de las letras españolas discutiendo como chiquillos en el colegio siempre es algo digno de ver.
Ambos están deseosos de complacer a los reyes, sobre todo para demostrarle al otro lo indispensables que son en la Corte. Cervantes es el cronista del encuentro entre ambas potencias y Lope el encargado de la obra teatral que ha de representarse al firmar el acuerdo. La vanidad de ambos y las ganas de conocer a «Xakespearé», como lo llama Lope, o «Chespir», según Cervantes, harán que ninguno de ellos saque lo mejor de su puño y letra. Shakespeare es interpretado por Nick Devlin y además, el duque de Lerma es su «inspiración final» para Macbeth. Ya saben, licencias ministeriales.
La libertad de las mujeres
En el siglo XIX o en el XXI las mujeres de esta serie son dueñas de sí mismas y la soledad no les aterra más que el vivir atadas a alguien o algo que no las permita ser ellas mismas. La introducción del capítulo ha sido toda una declaración de intenciones que, en boca de Amelia o Elena (Susana Córdoba), nos han puesto voz a todas.
La madre de Amelia (Fanny Gautier) está triste porque su hija no le ha dado ningún nieto y ella se justifica diciendo que lo hará al terminar sus estudios. Pero esto asusta más a su madre, pues «¿quién la va a querer a los 27 años?». Por otro lado, Alonso se aburre de su relación porque no consiguen tener hijos, pero Elena le explica que toma anticonceptivos y esto hace enfadar a Alonso, que no entiende cómo lo ha hecho sin su consentimiento.
Ambas dan una lección valiosísima que no todo el mundo parece tener tan clara. Cada individuo es dueño de sí mismo, pues la esclavitud se abolió hace unos siglos. Esto implica que las mujeres no deben tener hijos porque la sociedad se lo imponga o porque sus parejas quieran: debe ser algo consentido, en primer lugar, por la propia mujer. Y en El Ministerio del Tiempo no han querido dejar pasar esta maravillosa oportunidad para exponerlo.
Una ladrona, un rey en coma y un secuestro
Lola Mendienta (Macarena García) ha huido del ministerio llevando consigo valiosas obras de arte. Todos los agentes están conmocionados, además de seguir buscando alguna pista de quién es Marta (Belén Fabra) realmente. En el próximo episodio, la patrulla tendrá que salvar al rey Alfonso XII, que está en coma.
Eso trae una dificultad: el tiempo de Alfonso XII es también la época de Amelia, y no parece agradarle mucho llevar a cabo una operación en su propia era. La operación se complicará, pues los tres agentes de la patrulla acabarán secuestrados y amenazados a punta de pistola. ¿Será necesario volver atrás en el tiempo para salvarles?
Lorena Rodríguez