LOS ANTECEDENTES

Y tú, ¿por qué eres negro? es una pregunta que, verbalizada o no, el fotógrafo mostoleño Rubén H. Bermúdez se ha topado desde muy corta edad. También es el título del fotolibro que publicó en 2017, una autobiografía que representa a muchos más. Como secuela fílmica de este ejercicio tan personal e íntimo, llega la flamante ganadora de la competición nacional de Documenta Madrid 2021. A todos nos gusta el plátano es la segunda fase de un (por el momento) díptico, que visibiliza la descendencia afroamericana en España.

LA PELÍCULA

El fragmento en blanco y negro que abre el documental es toda una declaración de intenciones, nos habla del motor mismo de la película. Y no, no es que durante la hora siguiente vayamos a ver a personas de color bailando flamenco, pero sí las vamos a ver inmersas en la cultura española, su cultura, aquella en la que han nacido y que tiene (o debería tener) exactamente la misma validez que sus raíces, la misma validez que el arraigo en nuestro país para personas blancas o de cualquier otra nacionalidad o etnia que hayan nacido o residan aquí.

Ebebe Miranda, Oumoukala Sow, Ken Province, Nadia y Hannah, Chumo Mata y Agnes Essonti. Ellos siete son quienes disponen de la voz de narrador de este relato caleidoscópico y heterogéneo a todos los niveles. Rubén H. Bermúdez iba en busca de una voz colectiva, de agregar al viaje que inició con Y tú, ¿por qué eres negro? una nueva dimensión en la que ya no participase únicamente él. Así, asistiremos a una suerte de “collage” de dispar contenido, ni si quiera rodado con la misma cámara. Hay grabaciones hechas con el móvil, para otras se emplea una lente de ojo de pez…Cada una de las siete personas decide qué filmar y con qué filmarlo. Vemos playa, vemos niños, vemos una tormenta, animales, fiesta, sesión de maquillaje frente a un espejo, un desencuentro con el personal de seguridad del tren, recetas tradicionales con yuca. Y oímos, oímos varios idiomas, varios acentos, canciones en inglés o los diálogos de La que se avecina.

A todos nos gusta el plátano es un “cada loco con su tema”, y al mismo tiempo es un todo: el retrato de una realidad de trazo ininterrumpido que es parte viviente de nuestro contexto social. Rubén H. Bermúdez quería lograr una película que abrazase y lo ha logrado. Abraza e invita a abrazar.

LA SECUENCIA / EL MOMENTO

Cuando hablábamos de un trazo interrumpido no lo hacíamos por casualidad. Tanto al principio como al final de la cinta la cámara planea sobre un dibujo realizado a tiempo real, en un solo trazo y sin un fin. Es la perfecta captura metafórica de lo que representa el documental.

LA SORPRESA

Parece que no se pueda hacer una película sobre la negritud sin que el tinte del racismo asome por algún lado. Rubén H. Bermúdez rompe con este paradigma adoptando un enfoque de lo más orgánico y que nos hace reflexionar hasta qué punto miramos desde fuera a los que, de idéntico modo que nosotros, están dentro.

TE GUSTARÁ SI…

Si quieres comprobar que sí, se pueden contar historias sobre negros sin apelar a la vertiente del racismo o el rechazo del mismo.

LO MEJOR

• El enfoque genuino de Rubén H. Bermúdez, y lo estimulante y honesto que resulta el carácter experimental de su trabajo.
• El dejar hacer y deshacer a los siete protagonistas a su antojo, dota a sus grabaciones de una naturalidad y una verdad arrolladoras.

LO PEOR

• Que en algún caso hipotético, para algunos espectadores la falta de homogeneidad (especialmente formal) del conjunto pudiera llegar a difuminar el hilo conductor del documental, o resultar ambigua su finalidad.

Aitziber Polo