TOKAREV
Mientras muchos siguen ofuscados en ataques constantes hacía el cine español y todos los actores involucrados en el sector, especialmente directores y actores por ser los más mediáticos, lo cierto es que no hace falta dominar mucho el tema para darse cuenta que el talento de nuestros profesionales han sido tradicionalmente reconocido y reclamado para aportar en grandes porducciones internacionales. La realidad es que el panorama de nuestra industria es, siendo muy benévolos, desesperanzador. No hay que buscar culpables ni señalar con el dedo, porque lo que toca es buscar soluciones y superar problemas que llevan ya demasiados años encima de la mesa sin que aparentemente ninguna de las partes de ese paso conciliador que es la llave del futuro de nuestro cine. Con este contexto, casi permanente en la última década, era cuestión de tiempo que una nueva generación de cineastas, armados de talento e ilusión, apareciese para superar los complejos que arrastra nuestro cine cada vez que el juego de las comparaciones en su vertiente más destructiva entra en escena.
PACO CABEZAS forma parte de ese grupo de directores «JASP» de nuestro cine que han visto fuera de nuestras fronteras la oportunidad de demostrar su talento, de crecer, y de contar con la confianza que por estos lares tanto cuesta dedicarles, por unas o por otras razones. Poco a poco nos estamos acostumbrando a ver directores españoles en los créditos de producciones americanas y poco a poco descubrimos que la solvencia de estos directores detrás de una cámara poco tiene que envidiar a la que va ligada a nombres propios del cine americano. Así, en estos últimos tiempos hemos visto llegar a nuestras carteleras películas como MINDSCAPE (JORGE DORADO, 2013), NON STOP (JAUME COLLET-SERRA, 2014) y la que nos atañe, TOKAREV. Todas ellas películas dirigidas por jóvenes directores españoles, todas ellas películas de encargo, todas ellas muy bien filmadas, montadas y resueltas.
TOKAREV es la primera aventura en tierras americanas de PACO CABEZAS, un director que sorprendió en 2010 con CARNE DE NEÓN, un thriller que se movía con una comodidad asombrosa por el terreno de la violencia. Y de nuevo violencia es lo que nos espera con TOKAREV, un filme que elabora toda su trama en torno a un secuestro y un padre que opta por buscar a los culpables ante la falta de resultados de la policía. Gracias a un pasado oscuro nuestro protagonista tendrá al alcance de la mano todos los instrumentos necesarios para sumergirse en los ambientes criminales de la ciudad y buscar a los responsables, pero también respuestas. Sin ser un argumento novedoso, ni mucho menos el mejor guion de su género, TOKAREV entretiene y logra focalizar la atención del espectador en el devenir de la historia. PACO CABEZAS no tiene prisa en presentar los previos como tampoco la tiene para ir presentando un tablero donde el pasado de nuestro protagonista tiene un peso decisivo.
En el reparto, encabezado por el siempre temible NICOLAS CAGE (cuidado que el año que viene su nombre está ligado a 6!! producciones), nos encontramos con RACHEL NICHOLS, que aunque por norma irregular aquí está estupenda, y DANNI GLOVER en el papel de detective encargado de la investigación oficial, que aporta un toque nostálgico a esa época dorada que fue el género en la década de los 80 y comienzos de los 90, amén de comerse en plano a todo el que se le arrima. En el caso de nuestro querido NICOLAS, podéis estar tranquilos porque se esfuerza en alejarse de algunos de sus recientes registros bochornosos para mirar más al NICOLAS CAGE de CARA A CARA (JOHN WOO) o CON AIR (SIMON WEST), ambas de 1997. El resto del reparto es bastante atractivo, en especial PETER STORMARE.
TOKAREV no va a pasar a la historia del cine por nada, es un producto de encargo que PACO CABEZAS ha encarado sabiendo que de los resultados obtenidos dependen futuros proyectos, seguramente mucho más interesantes y personales. Con esta premisa cristalina en la mente del espectador que se enfrente a ella, lo mejor es dejarse llevar y observar la riqueza de recursos que usa el joven director para dotar de personalidad al producto. Desde el uso de la cámara lenta para potenciar el dramatismo de algunos episodios hasta los espasmódicos movimientos de cámara en las escenas acción, dejando algunas pinceladas de fotografía y localizaciones bastante acertadas. Y es que granito a granito una cinta que en manos de oto director estaría condenada, en manos de PACO CABEZAS esta historia de secuestros y venganzas gana los puntos necesarios para lograr entretener al espectador.
Cine de entretenimiento, cine de encargo. cine que se mira con cariño porque podemos disfrutar observando cómo el talento de nuestros directores salvan la función. Las hay mejores, claro que sí. Pero también las hay peores, mucho peores.
LO MEJOR:
- La dirección de PACO CABEZAS, que rebosa esfuerzo en dotar al conjunto de espíritu propio.
- Esta vez NICOLAS CAGE no hace el ridículo.
- Un giro final que encierra un mensaje mucho más profundo de lo que muchos quieren ver.
LO PEOR:
- La historia en su planteamiento no destaca por su originalidad. No ofrece nada nuevo.
- NICOLAS CAGE puede suponer un lastre para unos (a juzgar por sus último trabajos), y motivo de chanzas para otros. Aspectos que impidedirán que parte del público se involucre totalmente con la película.
Alfonso Caro