BIBLIOTECA: JOJO’S BIZARRE ADVENTURE STARDUST CRUSADERS #1
JoJo’s Bizarre Adventure es grandilocuencia, extravagancia y grandeza. Es una oda a la vida y la aventura que se nutre de otros elementos culturales como la música, el cine, la gastronomía o la moda para transmitir —si cabe— aun más este sentimiento. Fue también el lienzo en blanco sobre el que su autor plasmó aquello que lo hace tan único, una increíble capacidad creativa que no entiende de etiquetas ni encorsetamientos. JoJo’s Bizarre Adventure es el magnum opus de Hirohiko Araki y una de las obras más longevas de la industria que, actualmente, sigue abierta con un total de 119 volúmenes. JoJo’s Bizarre Adventure comenzó su publicación en 1987 en la Weekly Shōnen Jump. En 2005 fue traspasada a la revista Ultra Jump, también propiedad de Shūeisha, pero de periodicidad mensual y destinada a un público más adulto.
La ilustre obra de Hirohiko Araki está compuesta por una serie de sagas o arcos totalmente independientes pero que comparten una serie de elementos entre sí. Tras concebir Phantom Blood (1987-1988) como «prólogo» y figura cimentadora de tal colosal obra y Battle Tendency (1988-1989) como una brillante transición hacia la excelencia y magnitud del marco, Stardust Crusaders (1989-1992) es considerada junto a Diamond is Unbreakable (1992-1996) la mejor saga de la obra por gran parte del fandom. Esta tercera parte expande los horizontes de la franquicia e introduce una serie de elementos que pasarían a ser seña de identidad para el futuro de la serie.
JoJo’s Bizarre Adventure irrumpió en nuestro país por primera vez el pasado mes de junio de 2017 gracias a Editorial Ivrea, cumpliendo así el sueño de muchos seguidores de Araki que veían cómo por fin esta bizarra obra se licenciaba en España. Tras un laureado recibimiento, las sagas Phantom Blood y Battle Tendency ya se codean junto a One Punch Man como las obras de mayor éxito comercial de la editorial, motivo por el cual la confirmación de sus últimas cuatro sagas (Vento Aureo, Stone Ocean, Steel Ball Run, JoJolion) no tardó en hacerse oficial. Una vez superada esta primera toma de contacto con el universo creado por Hirohiko Araki, comenzamos la reseña de JoJo’s Bizarre Adventure Stardust Crusaders #1. Un análisis donde no destriparemos detalles sustanciales de su argumento e intentaremos ir más allá de lo que vemos a primera vista.
JoJo’s Bizarre Adventure es un viaje entre épocas y localizaciones, un trayecto que insufla aventura en su máximo exponente. Tras vivir la Inglaterra victoriana del siglo XIX, la bulliciosa Nueva York de los años 40 o los canales de Venecia, Stardust Crusaders sitúa al lector en el Japón de 1989. Joseph Joestar, carismático protagonista del arco Battle Tendency, viaja al país del sol naciente para visitar a su nieto Jotaro Kujo. Este joven de 17 años se encuentra encerrado en la celda de una comisaría por voluntad propia, negándose a salir debido a su incapacidad de controlar al «espíritu maligno» que le posee. Joseph viaja a Japón para contarle el misterio que se esconde detrás de este suceso sobrenatural, un misterio ligado al pasado del linaje Joestar. El espíritu que posee se conoce como Stand y es una manifestación del poder del individuo surgida por el despertar de Dio Brando, quien sobrevivió durante 100 años arrebatándole el cuerpo a Jonathan Joestar, abuelo de Joseph.
Stardust Crusaders #1 se convierte en el inicio de una carrera a contrarreloj, una persecución y viaje que llevará al elenco protagonista a las lejanas y cálidas tierras de El Cairo, lugar donde se encuentra Dio Brando. Tal y como reconoce el mismo Araki, las bases de esta tercera saga son las propias de un juego de mesa, con sus respectivos personajes avanzando entre una serie de paradas. Es muy palpable la fuerte inspiración en la novela de La vuelta al mundo en 80 días de Julio Verne, obra que incluso llega a mencionarse de manera explícita en las hojas de este volumen. Esto se ve reflejado a la perfección en los primeros compases de este tercer arco argumental de JoJo’s Bizarre Adventure, continuando el legado de magnitud y desfocalización de la acción iniciado en Battle Tendency. Phantom Blood se antojaba en ocasiones prisionera de su propio contexto, con escaso margen para la construcción y desarrollo de sus personajes. Su autor, consciente de ello, inició en su secuela una nueva hoja de ruta a seguir. La inclusión del concepto «Stand» por parte de Hirohiko Araki supone una renovación de la fórmula JoJo’s, ofreciendo un mayor grado de profundidad y dinamismo a la obra.
Uno de los aspectos que hacía que mantuviera cierto grado de escepticismo alrededor de este nuevo arco era precisamente la implementación de los Stands. En Phantom Blood y Battle Tendency el lector se encontraba ante una serie de elementos sobrenaturales ligados al misterioso poder de unas máscaras precolombinas que otorgaban el poder de la inmortalidad a sus anfitriones. La cohesión entre los arcos era perfecta, y la contrapartida del Hamon como poder para hacer frente a este mal estaba perfectamente integrado dentro de su contexto. Era una auténtica maravilla presenciar cómo el autor trataba esta habilidad con tanto ingenio y cómo el escenario se tornaba un aliado más en gran variedad de los momentos de acción. Sin embargo, el nacimiento de los Stands surge de la necesidad de Araki de plasmar los poderes psíquicos de manera muy visual, con el objetivo de facilitar la lectura al lector y dotar de un mayor dinamismo a la obra. Una decisión que, tras terminar el primero de los diez tomos que la componen, puedo afirmar que su planteamiento y ejecución dentro del marco ficcional es impoluto.
Si analizamos al protagonista de esta saga, observamos que la personalidad de Jotaro difiere bastante de la de sus antecesores. En Jonathan Joestar encontramos la figura del galán y caballero inglés, con el honor siempre como seña de identidad. En cambio, Joseph Joestar rompe por completo este esquema para ofrecer un versión mucho más «macarra» y carismática, fulminando esos aires de melodrama que tenía Phantom Blood. En Stardust Crusaders, Jotaro Kujo se presenta como un joven despreocupado y con tendencia a meterse en problemas y disputas. A primera vista puede darse un aire a su abuelo Joseph, pero conforme va avanzando el tomo el lector puede observar un carácter mucho más reservado y tajante —aunque con alguna que otra salida de tono al más puro estilo Joseph Joestar—. A pesar de ello, este joven japonés hace gala de un gran corazón y un gran espíritu de nobleza, algo muy característico del linaje Joestar.
En términos de narrativa, Stardust Crusaders #1 goza de una estructura muy bien definida y un ritmo altísimo. El estilo narrativo de Araki sigue la estela del utilizado en Battle Tendency, ofreciendo una sucesión de acontecimientos sin otorgar un momento de suspiro para el lector, garantizando el disfrute máximo. Este primer tomo se encarga de asentar los cimientos para la satisfactoria evolución de la saga, presentando a un grupo de personajes un tanto variopinto pero prometedor, así como los nuevos elementos sobrenaturales que comentábamos anteriormente. Un soplo de aire fresco para seguir haciendo de la franquicia JoJo’s más JoJo’s que nunca. El autor impregna una gran dosis de frenetismo en estos primeros capítulos, dejando poco margen para vislumbrar los distintos matices de sus personajes. Algo que, muy probablamente, se desarrolle en los posteriores volúmenes. Stardust Crusaders #1 es una apología a la aventura y como tal, busca transmitir esas sensaciones y emociones derivadas del viaje en compañía, de una odisea grupal para alcanzar un fin, un fin cuyo trayecto puede brindar momentos memorables.
El estilo artístico de Hirohiko Araki sigue muy de cerca la línea de la recta final de Battle Tendency, haciendo uso de un tipo de trazado y una ejecución mucho más limpia que en sus comienzos. Cuando Araki comenzó la serialización de JoJo’s Bizarre Adventure en 1987 mantuvo una fuerte inspiración en el estilo que Tetsuo Hara empleó en Hokuto no Ken (1983). Un diseño de personajes masculinos de dimensiones enormes e hipertrofiados al máximo junto a un dibujo algo «tosco» y con un claro predomino de las tonalidades oscuras eran algunos de los elementos que compartían ambas obras, a pesar del toque personal impregnado por Araki. Este estilo inicial basado en un dibujo más grotesco y estático ha ido evolucionando a lo largo de los arcos, ofreciendo un mayor grado de detalle tanto en fondos como en personajes, unas proporciones físicas mucho mejor plasmadas y un dinamismo que poco o nada tiene que ver con sus comienzos.
La pomposidad y exageración siguen siendo marca de la casa en Stardust Crusaders, ofreciendo al lector numerosos paneles cargados de ella. Por otro lado, esta tercera parte cuenta con una muy buena composición de páginas y un dominio en el uso de los planos mucho más dinámico. En los planos de acción el lector ya no cuenta solo con personajes de carne y hueso en los respectivos paneles, los Stands juegan ahora un papel crucial para dotar de un mayor impacto visual y fuerza las escenas. El grado de detallismo de los personajes se extrapola también a estas «entidades sobrenaturales» con las que Araki puede jugar de mil y una maneras, ofreciendo un grado de poderío visual nunca antes visto.
Hace aproximadamente algo más de medio año desde que Editorial Ivrea lanzara por primera vez en el mercado español el primer volumen de Phantom Blood, primera saga de la icónica y deseada obra escrita e ilustrada por Hirohiko Araki. JoJo’s Bizarre Adventure se ha convertido en una auténtica obra de culto del manga para una cantidad acérrima de seguidores de todo el mundo. Su dimensión, personajes, narrativa y estilo han cautivado a millones de lectores que ven en la figura de Araki un autor diferente al resto, con un estilo único y una creatividad pasmosa.
Stardust Crusaders #1 está compuesto por un total de 250 páginas. Estamos ante una edición formato B6, tankoubon rústica con sobrecubierta y cuya dimensión es de 13×18 cm. Una edición deluxe que abarca en un total de 10 volúmenes los 152 capítulos que componen los 16 tomos de la obra original. Una edición que, sin llegar a ocupar demasiado espacio, consigue reducir en cierta medida la mastodóntica cantidad de tomos que forman la colección. La calidad de los materiales que conforman este tomo es indiscutible, ofreciendo un plus de calidad por encima de la media de la editorial. La portada consigue un gran impacto visual tanto por su diseño como por la combinación de los colores empleados, utilizando en esta ocasión el color azul como seña de identidad de esta nueva saga frente al rojo y verde empleados en Phantom Blood y Battle Tendency. Añadir que tanto el diseño como el formato realizados por Ivrea son únicos, siendo una de las pocas situaciones donde el diseño original japonés no se impone como predominante.
JoJo’s Bizarre Adventure Stardust Crusaders #1 salió a la venta el pasado 1 de febrero a un precio de 12 €. Este primer tomo cuenta con un total de 15 capítulos y ninguna errata en cuanto a contenido. Sin embargo, en mi caso, me he encontrado con un par de capítulos con una capa de entintado extra; algo que realmente no sé si es cuestión de la impresión realizada por la editorial española o heredada de la edición original japonesa. A pesar de esto, se trata de un «error» de menor importancia que no impide una eficaz lectura. La localización a nuestro idioma está perfectamente lograda gracias a la labor de Pablo Tschopp, respetando como viene siendo habitual en la serie muchas de las expresiones y nombres de habilidades originales.
Edu Allepuz
¿Te gusta nuestro contenido? Apóyanos en nuestro Patreon y ayúdanos a seguir creciendo.