
Cuenta la leyenda que cada 27 años revoluciona las alcantarillas de la (ficticia) localidad de Derry, que se alimenta de los temores de los niños y que va repartiendo globos rojos a diestro y siniestro. ¿No lo conocéis? Quizá su cara os resulte familiar. Algunos lo definen como Eso, pero él se llama a sí mismo «Pennywise, el payaso bailarín», y otra cosa no, pero hay algo de él en lo que todos coincidimos: da muy muy y decimos muy (y podríamos seguir infinitamente añadiendo el adverbio) mal rollo. Lo creó uno de los maestros de terror, el gran escritor Stephen King en su novela de 1986. Años después, en 1990, lo hizo visible el director Tommy Lee Wallace en su miniserie y Eso apareció aterrorizando la infancia de los niños. 27 años después, como lo prometido es deuda, el payaso ha vuelto a la gran pantalla: Pennywise ha vuelto mucho más hardcore y oscuro. Y no daremos muchos más detalles, no nos gustan los spoilers.

¿Que hay despistados que no se acuerdan o no conocen la historia? En unas líneas os la resumimos: son finales de los años 80 y en el pueblo de Derry comienzan a desaparecer niños. Parece ser que un temible payaso aparece cada cierto tiempo para alimentarse de carne infantil…


Gran trabajo el de Bill y el de los pequeños que forman el llamado grupo de «Los perdedores»: el líder del grupo y hermano de Georgie, Bill (Jaeden Lieberher); el charlatán Richie, encarnado por Finn Wolfhard (Stranger Things); la única chica, Beverly (Sophia Lillis); el hipocondríaco Eddie (Jack Dylan); el judío Stan, que es Wyatt Oleff (Guardianes de la galaxia); el nuevo, Ben, (Jeremy Ray) y el afroamericano Mike, interpretado por Chosen Jacobs. Juntos forman un grupo con el que el espectador empatiza en emociones y enseñan lo que es una verdadera amistad por encima de todo. Los cameos del español Javier Botet (Alien: Covenant) os sorprenderán y os dejarán alucinados. ¿Habéis descubierto de qué personaje hace? Tirad de currículum y os lo podréis imaginar.
Chung-hoon Chung (La doncella) no nos podía fallar, y hace que cada minuto de los 135 del metraje (que hemos de matizar que se pasan volando) sean elegancia visual pura, transportándonos enteramente a los 90. Homenajes al trabajo de King, referencias cinematográficas y de objetos de la época… Cada detalle está mirado y requetemirado para respetar la ambientación y la esencia que creó King. Hay algunos pequeños cambios en su guion con respecto a la novela (como por ejemplo la forma de atemorizar a los muchachos) y comportamientos más duros por parte de sus personajes (el bullying de los matones, las conversaciones entre los niños, muertes y actos mucho más gore), con escenas explícitas que nada tenían que ver con las de la cinta original. Todo esto con un claro y muy acertado objetivo: conseguir aterrorizar hasta a los espectadores más fuertes y valientes. Y es que si revisionamos (os lo recomendamos) la miniserie de Wallace, veremos que nos sigue asustando el payaso, y pasen los años que pasen así será, pero el terror de lo demás ya no hace el mismo efecto que en los 90.Por eso llega Muschietti para recordarnos que con esta historia se puede pasar mucho miedo y para hacer, además, homenajes a los payasos de cine, incluido al de Curry (¡fijaos bien!). Todos flotan aquí abajo, incluidas las butacas en el cine…
Podríamos decir que es la mejor adaptación al cine de Stephen King hasta el momento, y no, no exageramos. Muschietti nos deja con ansias de más, de que llegue pronto esa segunda parte en la que los niños son adultos y vuelven a enfrentarse de nuevo con su mayor temor: It, el payaso. ¿Te atreves a flotar con nosotros y el payaso Pennywise?
LO MEJOR:
- Un remake de diez.
- La mejor adaptación a la pantalla de una novela de Stephen King.
- La gran calidad en la dirección de Muschietti es digna de aplaudir.
- La fotografía.
- Consigue darnos mucho miedo.
- Todas las actuaciones.
- La habitación de los payasos (¿os suena la cara de algunos?)
LO PEOR:
- La espera de la segunda parte.
- No ser fan de la historia de It (su libro y su miniserie).
María Páez