THE DETECTIVE IS ALREADY DEAD, BAIT SOBRENATURAL
El Psy Congroo es ya un chascarrillo mítico del medio. ¿Lo mejor? Que no tiene significado alguno. Steins;Gate es una obra nacida del imaginario y la aleatoriedad que, no obstante, obtiene forma a medida que avanza la obra y no solo justifica sus excentricidades, sino que las convierte en el núcleo de una narrativa sólida y efectiva, gobernada por la capacidad de Chiyomaru Shikura para atar cabos y formar con ellos una compleja red de conceptos.
Y es que la aleatoriedad puede ser una pieza clave en el desarrollo de una obra siempre y cuando se sepa jugar esta pieza junto a las correctas. Un arte que no está al alcance de todos y que, sin la precisión necesaria, puede convertirse en una amalgama de ideas y ejecuciones a destiempo. Un riesgo que toma The Detective is Already Dead —La detective está muerta— a lo largo de su desarrollo.
Un estallido y un fundido a negro
Kimi, el protagonista de la obra, tiene mucho de Kyon. Las mismas escasas fuerzas para vivir, su capacidad para verse involucrado en todo tipo de problemas sospechosamente poco naturales y, sobre todo, su apariencia de personaje secundario con la particularidad de hacer brillar a su compañera, quien —pese a ser relevada a un segundo plano— ostenta realmente el peso del desarrollo narrativo de la obra.
Las diferencias son claras. Y es que dónde Haruhi supone el pilar fundamental de la obra en las novelas de Nagaru Tanigawa, Siesta fallece, o eso anuncia la voz en off, en el primer episodio.
Sin sorpresas, pues el propio título de la obra versa sobre ello, el protagonismo de la serie tiene el espacio justo y suficiente para dinamitar con un primer capítulo explosivo para reducirse al eco de su propia existencia a lo largo de los siguientes episodios que forman el conjunto completo con un vago intento de hacer de lo aleatorio una pieza fundamental que se escapa entre sus dedos y se diluye de forma más clara a cada nueva entrega que nos ofrece la adaptación del todavía reciente estudio ENGI.
Entre conspiraciones y organizaciones secretas
Con organizaciones secretas de por medio liderando las sombras, entes sobrenaturales secuestrando aviones, idols millonarias con oscuros secretos y fanáticos religiosos con poderes especiales, The Detective is Already Dead forma un entramado de ideas que superponen entre pasado y futuro y que exigen al usuario enfrentarse a ellas con una creencia ciega en su evolución.
Es la idea del Psy Congroo, de nuevo, pero sin una seguridad tangible de que todos estos conceptos puedan tener un motivo para existir más allá del juego de cada pieza en episodios que, si bien entrelazan sus objetivos, acaban suponiendo espacios separados con un conflicto individual que resolver, las tantas de las veces, con un nuevo elemento paranormal salido de ninguna parte.
Hay un intento latente en tanto que la muerte de Siesta no es un fin, sino una mecánica más. En su afán por los tirabuzones narrativos, Nagisa Natsunagi, una joven estudiante, acaba recibiendo el corazón de Siesta, despertando en ella parte de su complicidad como detective y formando un nuevo dúo con Kimi donde, a modo de desarrollo de personajes, es él ahora quien debe asistirla y formarla. Por otro lado, el pasado entre su protagonista y su principal compañera toma el control de tanto en tanto para dividir la historia en dos puntos, que muestra la evolución del chico junto a ambas detectives y en planos diferente para reforzar a sus personajes y, con toda seguridad, asistir a un final que consiga unir la muerte de Siesta con la existencia de Nagisa.
Se agradece también, en cierta medida, el espacio femenino que permite la serie al dar poder tanto a Siesta como Nagisa en su decisión por darle el poder a ellas y permitir que su protagonista real forme parte de un supuesto segundo plano pero, incluso así, el humor japonés y los tópicos del medio acaban asomando en un poco distinguido role reversal que acaba dando paso al fanservice humorístico clásico y desprovisto de gracia.
De buenas ideas no se vive
Al final, por desgracia, The Detective is Already Dead es presa de su propio imaginario. La nula justificación de su desarrollo le pesa demasiado como para conseguir un interés genuino en su próxima intromisión y, aunque cuenta con ideas interesantes, su evolución acaba basándose en esperar una nueva salida del encuadre. Ya sean hombres lobo cambia formas, mechas gigantes o cualquier otro invento paranormal.
Con una potencial estructura de fondo, la adaptación de las novelas de Nigojū y Umibōzu distinguen algunos aspectos que, pese a todo, invitan a seguir intentando desvelar los secretos de la obra. El juego de los tiempos con el misterio de la muerte de Siesta y sus particulares flashbacks o la relación entre Nagisa y Kimi y su desarrollo personal —aunque afectados por algunas de las decisiones de la serie— siguen de fondo e, insisto, resultan interesantes.
Con un trabajo sobresaliente en el primer episodio por parte de ENGI y una constante pérdida de fuerza, más liderada por la narrativa que por el propio estudio, The Detective is Already Dead es una obra que intenta, en vano, vivir de factores que se guarda para sí, incapaz de darles una forma tangible que pueda apreciar el público. Un intento que, por desgracia, sirve más como cebo que como funcionalidad.
Óscar Martínez