EL OTRO CINE: LA PIEDRA DE LA PACIENCIA.
El escritor y director de origen afgano ATIQ RAHIMI lleva al cine por segunda vez una de sus novelas para contarnos desde dentro el dolor de un pueblo que lleva demasiado tiempo sometido a la violencia. Si en TIERRA Y CENIZAS los protagonistas eran un abuelo y un nieto víctimas del conflicto, en LA PIEDRA DE LA PACIENCIA la guerra se convierte en el telón de fondo de una historia interior, escondida, pero no por eso menos violenta y desgarradora. Premiada en el Festival Internacional de Cine de Gijón de 2012 y con el Premio Goncourt de novela, ATIQ RAHIMI vuelve a sorprender con una sensibilidad casi poética a través de la que es capaz de rescatar la belleza que se esconde en el horror y con ella la esperanza.
Toma como punto de partida la situación de anulación extrema a la que son sometidas las mujeres bajo el auspicio de las dos fuerzas más poderosas que históricamente han vinculado al individuo con la sociedad, la religión y la familia. La rebelión desde el interior es prácticamente imposible. El aislamiento y el miedo se convierten en carceleros eficaces que transforman la esclavitud en un aparente sometimiento consentido. Cualquier resquicio de individualidad, de deseo personal es castigado y eliminado. Pero esta opresión extrema requiere su estructura opresora que si se quiebra liberará todo lo que escondía de forma imparable.
ATIQ RAHIMI nos muestra ese momento de quiebra. En un lugar anónimo, en primera línea de conflicto, la esposa de un integrista musulmán es abandonada junto a su marido herido y en coma y sus dos hijas. Su situación de desamparo se convierte en su verdadera liberación. La soledad le obliga a tomar decisiones por primera vez, se convierte en dueña de sus actos y de sus palabras. El deber de rezar junto al cuerpo de su marido inerte se transforma en un monólogo que hace brotar incontenible todo un interior guardado y reprimido durante años. La fuerza de la palabra, la posibilidad del contacto físico son una terapia de reconstrucción personal que GOLSHIFTEH FARAHANI (RED DE MENTIRAS, A PROPÓSITO DE ELLY), cuya interpretación le valió el premio a la mejor actriz en el Festival de Cine de Gijón, muestra con una delicadeza llena de matices y con una técnica casi teatral en la que cada movimiento está cargado de significado. Sólo encontrará ayuda y apoyo en su tía, prostituta en un mundo donde, paradójicamente, la esclavitud de la prostitución se transforma en un camino de libertad.
La Piedra de la Paciencia es un tributo al universo femenino en un contexto donde todos sus valores (la belleza, la sensualidad, los sentimientos, la inteligencia) están demonizados y anulados con el único objetivo de eliminar su acción perturbadora sobre un mundo dominado por los hombres. Eso sí, bajo el pretexto religioso, el amparo de la violencia y el beneplácito de la socieda occidental que lo admite (o no lo condena) como prueba de la más paradójica y vergonzosa tolerancia cultural. Con esta película RAHIMI da voz a esas mujeres y con la voz y la palabra les da la esperanza.
LO MEJOR:
- La denuncia de la situación de esclavitud en la que viven muchas mujeres bajo el pretexto de la religión.
- GOLSHIFTEH FARAHANI, cuya belleza exterior se transforma en interior a través de una interpretación que conmueve.
- Los maravillosos monólogos con sus pequeños flash back perfectamente integrados y las conversaciones con la tía llenos de carga poética.
LO PEOR:
- No hay nada
Marina Calvo.