Tras el recital interpretativo que nos regaló Lena Headey (algo a lo que ya nos tiene acostumbrados, por otra parte) y la master class sobre maldad perfectamente ejecutada por su Cersei Lannister la pasada semana, era de esperar que el cuarto episodio de Juego de tronos nos trajera una respuesta contundente de su mayor grano en el culo en la actualidad, la reina de los innumerables títulos.

Atención: Contiene spoilers

HBO nos prometió una batalla por episodio y, a excepción del 7×01, lo está cumpliendo. Tras el asalto a la flota de los hermanos Greyjoy y la conquista de Roca Casterly y Alto Jardín, ambas con minipunto para los Lannister, Botines de guerra nos ha dejado el mayor combate de lo que llevamos de temporada y la primera victoria para Daenerys, que por fin ha sacado a sus dragones a pasear.

Juego de tronos: El reencuentro

Invernalia, cual plató de Telecinco, se suma a la ola nostálgica y nos regala un reencuentro por episodio. Los Stark van poco a poco regresando a casa y ya solo queda que Jon retorne cargado de vidriagón para que los hermanos vuelvan a estar juntos tras seis años plagados de calamidades para los cuatro.

De todos modos, de la llegada de Arya lo más destacable no es su encuentro con Bran y Sansa, pese a las geniales muecas de burla de lady Stark cuando su hermana le habla de su lista de nombres. Lo más interesante, y que seguro dará pie a una nueva trama, es el juego de miradas de recelo entre Arya y Meñique, muy sorprendido este último por la destreza de la antigua chica sin nombre con el manejo de la espada.

El Cuervo de los tres ojos tampoco se fía del pretendiente de Sansa. Aún desconocemos con qué intenciones le ha regalado la daga, pero si se hubiera cortado mientras se despedía, frío como el hielo, de Meera probablemente no habría soltado ni una gota de sangre.

Rocadragón: el shippeo es real

La belleza de Zumaia y San Juan de Gaztelugatxe convertidas en Rocadragón nos sigue fascinando cada semana, y ya podemos declarar como oficial el coqueteo entre Jon y Daenerys. El Rey en el Norte se ha llevado a la madre de dragones de ruta espeleológica para confirmar tres cosas: que es rica en vidriagón (aunque ella no lo aprecie), que una pintura rupestre vale más que la palabra de tres hombres y que él le pone ojitos.

Si en algo es buena Daenerys es en las batallas dialécticas. Jon Nieve está a medio argumento de hincar la rodilla y declarar su lealtad a la reina, y Tyrion ha tenido que asumir que ella planteó la guerra contra los Lannister mejor que él.

Rocadragón también ha vivido su particular reencuentro, en este caso entre Jon y Theon, aunque mucho menos enternecedor que los de Invernalia.  El mayor de los Greyjoy vivos pasará a la historia como uno de los personajes más humillados, ninguneados y despojados de orgullo de la televisión. Ojalá la serie le regale un buen final con el que redimirse de tanto bochorno.

Fuego camina conmigo

Como decíamos, Daenerys no podía quedar impasible ante la ventaja que Cersei había adquirido barriendo de un plumazo a dos de sus casas aliadas: los Martell y los Tyrell. Echando la vista atrás, parece que los consejos de Olenna eran más efectivos que los de Tyrion y la madre de dragones ha decidido entrar en acción.

Acompañada por una horda de dothrakis y a lomos de su Drogon, protagoniza la (por el momento) gran batalla de la séptima temporada. Brillantemente filmada por Matt Shakman (The Good Wife, Fargo) en el Parque Natural de los Barruecos, el fuego ha sido el gran protagonista del duelo contra los Lannister, en el que vemos a Jaime en sus últimas, protagonizando uno de los cliffhangers más potentes de la serie. ¿Habrá perdido Cersei a su mano real, hermano y amante? Nos quedan siete largos días para averiguarlo. 

Dudas/reflexiones

• Daenerys a lomos de un dragón mola mucho, pero ningún personaje es tan badass como Arya Stark. ¿Puede alguien hacerle sombra en cantidad de secuencias thug life?
• Si Drogon muriera a consecuencia de los ataques sufridos en la última batalla, desaparecería una de las teorías más extendidas sobre el final de la serie, esa en la que esos tres Targaryen acabarían volando con los tres dragones.
• ¿Qué pasa con Dorne? ¿Quién gobierna ahora allí? ¿Hay siquiera algún habitante? Y lo que es peor, ¿a estas alturas le interesa a alguien?

Fon López