Ayer todos los medios, incluido El Palomitrón, se hacían eco de la llegada de NETFLIX a España. El desembarco del gigante americano de consumo no lineal ha generado muchas expectativas que probablemente no puedan cumplirse a corto plazo. Estando permanentemente sobreinformados acerca de las novedades en ficción internacional, el hecho de que la plataforma solo cuente de momento con producción propia en cuanto a derechos de primera emisión le perjudicará frente a la potente oferta de MOVISTAR+.
Hay que tener en cuenta que NETFLIX no es una televisión online con canales premium, y que muchos de los consumidores dispuestos a pagar por contenidos no solo están buscando ficción, siendo el fútbol el principal reclamo de abonados de la televisión de Telefónica. Y, aunque a muchos por aquí nos extrañe, Cristiano Ronaldo tiene más tirón que TAYLOR SCHILLING. Además, el oligopolio en las telecomunicaciones les beneficia tanto a ellos como a Orange y Vodafone, funcionando la televisión como un elemento más de los paquetes de telefonía y ADSL.
NETFLIX parte con la ventaja de poder producir contenidos globales, teniendo ya en catálogo series como NARCOS o SENSE 8 (la cual es un poco anglocéntrica, todo sea dicho) y prometiendo crear contenidos también en España que serán distribuidos en todos los países en los que ya opera. También siguen siendo pioneros en la forma de emisión, colgando las temporadas enteras el mismo día de su estreno, pero dudamos que este hecho diferencial pueda seducir lo suficiente, de momento, como para inclinarse por su oferta y no por la de la competencia. En el catálogo cuentan, además, con series españolas ya emitidas en abierto y con las primeras temporadas de sus productos estrella ORANGE IS THE NEW BLACK y HOUSE OF CARDS, cuyos derechos de primera emisión siguen estando en manos de MOVISTAR+. El que se erige como principal aliciente es su acuerdo de desarrollo de series de la factoría MARVEL, como la ya estrenada DAREDEVIL y la próxima JESSICA JONES.
MOVISTAR SERIES cuenta a día de hoy con el catálogo más amplio. Su acuerdo de exclusividad con HBO le permite estrenar antes que nadie las aclamadas JUEGO DE TRONOS, TRUE DETECTIVE (ex aclamada en este caso), THE LEFTOVERS o GIRLS. También cuentan con BETTER CALL SAUL, TRANSPARENT, THE AFFAIR, FARGO, OUTLANDER y PENNY DREADFUL, entre otras muchas, así como temporadas completas de series antiguas. Y ya están en marcha proyectos de producción propia como las series de DAVID TRUEBA y ALBERTO RODRÍGUEZ.
En cuanto a la guerra de precios, MOVISTAR SERIES ofrece una cuota más baja que NETFLIX, 5€ frente a los 7,99 € del paquete básico de los americanos, si bien este cuenta con cine y en la plataforma de MOVISTAR se tendría que contratar aparte. Eso sí, cuentan con la gratuidad de CANAL+, al que han desprovisto de contenidos internacionales en favor de aumentar la producción de programas originales con el sonado fichaje de ANDREU BUENAFUENTE, que se suma a los ya existentes ILUSTRES IGNORANTES, ÓXIDO NITROSO, etc. A esto hay que añadirle la oferta de canales temáticos como FOX, TNT y AXN que están potenciando igualmente la producción global de contenidos a través de sus cadenas madre en Estados Unidos y que cuentan actualmente con los derechos de series de renombre como THE WALKING DEAD o HOMELAND. Estas también pueden verse en ORANGE TV o VODAFONE.
El resto de competidores online se especializan más en su catálogo de videoclub on demand, bien de nicho (FILMIN) o palomitero (WUAKI TV), mezclado con series de saldo: primeras temporadas de algunas series emitidas en otras plataformas o ficciones antiguas, pero ninguna cuenta con derechos de primera emisión.
Falta por ver cómo será la disputa a partir de ahora por la adquisición de las series que se estrenen en los próximos años, aunque la capacidad de producción de contenidos globales parece que será el factor fundamental para sobrevivir en una industria cada vez más repartida. Y ahí NETFLIX tendrá mucho que decir.
Fon López
